Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

NBA

División Central: sin un favorito claro

Por José Luis Ajero AstudilloTiempo de lectura1 min
Deportes28-10-2001

A simple vista, se plantea un panorama complicado. La mayoría de los equipos, salvo Raptors, Bucks y Hornets, se dieron el año pasado una campaña de tregua para ir acoplando sus nuevas estrellas. Esta temporada toca ya ganar, y no va a ser tarea fácil. Para empezar, lo suyo será eliminar a los que carecen de posibilidades para hacer nada destacable.

Chicago y Cleveland son dos clásicos de la incompetencia en los últimos años. Michael Jordan se fue echando mal de ojo a un equipo que no levanta cabeza: su plantilla ahora está compuesta por gente muy veterana o muy inexperta, y hasta que cojan el aire van a tener que perder muchos partidos. Lo de los Cavaliers va más allá: no reúnen un equipo de garantías desde hace años y éste tampoco lo es. Tienen a sus postes lesionados, no se han movido en el mercado y tampoco pescaron mucho en el Draft. Una vez olvidada la cola hay que ir con la cúspide. Por méritos de despacho hay que colocar a los Toronto Raptors: el año pasado ya dieron más guerra de la esperada, y este año prometan aún más. Son más noticia por lo mantenido, entre ellos Vince Carter, que por lo fichado, Olajuwon, que no es moco de pavo. Junto a ellos tenemos dos equipos de pequeños. Milwaukee Bucks y Charlotte Hornets tienen la cualidad de la velocidad como mejor arma. Sólo con unos ligeros retoques que los hacen un pelo más competitivos, pero que los merman de potencial con respecto a otros que se han reforzado más. En un estamento intermedio se encuentran Detroit Pistons e Indiana Pacers, dos equipos con mimbres, pero a los que no se les debe exigir mucho porque siguen tejiendo equipos de futuro. Los Pistons no se aclaran y buscan acompañantes para Jerry Stackhouse, mientras que los Pacers debaten sobre a quién dar la pelota a la hora de buscar la canasta rival, Reggie Miller incluido.