HUELGA DE PILOTOS
La huelga de Iberia provoca que los títulos de la compañía alcancen el mínimo
Por María Lloria
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Economía19-06-2001
El primer día de huelga transcurrió con una inusual normalidad en los aeropuertos españoles. La puntualidad en Barajas fue del 80 por cierto y eso gracias a que se cumplieron los servicios mínimos que el Ministerio de Fomento había impuesto, es decir, el 72 por ciento de los vuelos.
Sin embargo estas notas favorables tienen su contrapunto, y hay que buscarlo en la cotización bursátil de Iberia. El pasado martes, la compañía aérea alcanzó el mínimo desde que el pasado 3 de abril se estrenara en el parqué. Los títulos de Iberia cayeron un 0,9 por ciento y cerraron a 1,10 euros. Aquellos que adquirieron acciones de la compañía aérea en el momento en que se privatizó arrastran unas pérdidas del 7,5 por ciento. Lo que en un principio se consideró una inversión segura aparece desmentido dos meses después. Los pilotos tienen previsto continuar con los todos paros los primeros cuatro martes de julio y todos los lunes de agosto y el día 31. Las reivindicaciones de los pilotos se centran básicamente en asuntos relacionados con el salario. Los pilotos piden la recuperación de la clave 104, es decir, el descuento salarial que se aplicó a la compañía desde 1995 para salir de la crisis. Iberia se muestra favorable a pagar, pero vincula esta recuperación a la productividad, a la mejora de resultados y a la obtención de beneficios. Spanair y Air Europa son las compañías aéreas que compiten con Iberia. La huelga de la compañía no supuso un gran aumento en los vuelos de las otras dos empresas, tan sólo la línea Madrid-Barcelona alcanzó un mayor aumento en la ocupación que en otros días. No obstante, tampoco se vieron excesivamente perjudicados por los efectos que podrían haber producido la huelga de Iberia. En el conjunto del tráfico aéreo no se produjeron excesivas demoras.