SERBIA Y MONTENEGRO
El asesinato del primer ministro serbio conmociona al país
Por Isaac Á. Calvo1 min
Internacional16-03-2003
El recién formado Estado de Serbia y Montenegro -antes llamado Yugoslavia- está viviendo una de sus primeras crisis tras el asesinato del primer ministro serbio, hombre que entregó a Milosevic al Tribunal Penal Internacional y que era partidario del acercamiento a Occidente.
Zoran Djindjic, primer ministro de Serbia, fue asesinado a primera hora de la tarde del pasado miércoles cuando salía del edificio del Gobierno en Belgrado. Djindjic, de 52 años, recibió en el pecho y en el estómago dos impactos de bala de gran calibre, disparadas por francotiradores desde dos posiciones distintas. Aunque el mandatario serbio fue trasladado con vida a un hospital, la gravedad de las heridas hizo que la operación de urgencia no tuviera éxito. Nada más conocerse la noticia, las Fuerzas de Seguridad detuvieron a tres personas relacionadas con el atentado. Esta cifra fue aumentando durante la semana pasada y ya se habla de decenas de arrestados. Fuentes gubernamentales acusan a bandas mafiosas locales de estar detrás del asesinato, aunque sigue sin descartarse la posible implicación de grupos partidarios del ex presidente de Yugoslavia Slobodan Milosevic. Esta creencia se fundamenta en que fue Djindjic el que autorizó la entrega de Milosevic al Tribunal Penal Internacional para que se le juzgue por su actuación política a partir de los años 90. Zoran Djindjic, que ya había sufrido varios atentados de los que había salido ileso, también se caracterizó por impulsar políticas de acercamiento a Estados Unidos y a la Unión Europea (UE) para que Yugoslavia saliera del aislamiento internacional en el que se encontraba.
Seguir a @IsaacACalvo
Isaac Á. Calvo
Licenciado en Periodismo
Máster en Relaciones Internacionales y Comunicación
Editor del Grupo AGD