TURQUÍA
La Unión Europea no se decide sobre la adhesión turca
Por Salva Martínez Más
2 min
Internacional07-12-2002
No hay consenso sobre la adhesión de Turquía en la Unión Europea. Si para el presidente de la Convención sobre el futuro de Europa, Valery Giscard D´Estaign, el ingreso de Turquía en la UE supondría el fin de ésta, Alemania y Francia proponen negociar bajo condiciones con Estambul en 2005.
En Turquía no se ve con buenos ojos ninguna de las dos afirmaciones. Estambul quiere la entrada en la Unión Europea y la quiere cuanto antes. El acuerdo que propondrán Alemania y Francia a los demás países miembros en la próxima Cumbre de Copenhague (Dinamarca) es, para Turquía, “inaceptable”. Así lo afirmó el líder del poder en Turquía el pasado viernes, Tayyip Erdogam. También dijo que “un nuevo retraso a Turquía que lleva 40 años en la puerta de Europa supondrá que la historia no os perdone jamás”. Los medios de comunicación del país han calificado que “fechas inciertas no harán posible tener el mismo entusiasmo respecto de la UE”. A estas manifestaciones se suman las presiones de Washington. Estados Unidos parece estar muy interesado en la entrada de Turquía en la UE. El pasado jueves, la secretaria adjunta estadounidense para Asuntos Europeos, Elisabeth Jones, avaló las reformas democráticas que ha vivido el país para entrar en la UE. Las reformas son para Tayyip Erdogam “suficientes” pone como ejemplos la abolición de la pena de muerte y la concesión de derechos culturales a la minoría kurda. Pero todavía quedan escollos en el país ahora gobernado por islamistas moderados, como son la presencia de un Ejército de ocupación en Chipre desde 1975 y lo que desde la UE se denomina como una mayor democratización y mejora de la situación en materia de Derechos Humanos. El pasado jueves, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo condenó a Turquía por la detención de un miembro de la Asociación de Derechos Humanos y del Partido Socialdemócrata turco. La detención supone, según el tribunal, “una violación de los derechos a la libertad y seguridad” puesto que se hizo de forma “irregular”. Aún con estos inconvenientes, muchos líderes europeos se han manifestado a favor de la causa turca. El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, coincidió con los medios de comunicación turcos al afirmar que “un retraso en la adhesión podría constituir una desilusión para los ciudadanos turcos”. También Reino Unido, a través de su ministro de Exteriores, Jack Straw, se ha declarado a favor de la adhesión.