ANÁLISIS DE LA SEMANA
Un huequito en la maleta
Por Almudena Hernández1 min
Sociedad28-07-2002
Con la maleta sobre la cama comienza el duende a husmear en el armario para llevar las cosas necesarias para las vacaciones. Unas playeras y un buen libro. Ganas de no pensar -o de pensar poco-. El disfrute y el descanso como pronósticos. Un trozo de mar, o de tierra, o de paisaje. Un puñado de recuerdos. Aroma de realidad y un pellizco de nostalgia, aunque sólo sean unos días fuera de casa. Pan no, que el pan endurece con el tiempo. Tampoco noticias, porque en verano casi no las hay, a pesar de que las desigualdades del mundo llaman a gritos todos los días desde el otro lado del cristal de la televisión. Y, como en el resto del año, en agosto apenas hay respuesta a la injusticia. En casa quedan sólo un par de Rodríguez. Durante el viaje conviene repasar mentalmente si al final se ha metido o no en la maleta un poquito de fe -a pesar de los pecados-, un poquito de precaución y un mucho de amor al entorno, ese gran complejo hotelero cien por cien natural, si es que el hombre quiere tomarse en serio eso de veranear en en una naturaleza digna antes de que pueda destrozar la Tierra un asteroide. Y en el bolso de mano, buena compañía y un sobrecito con un papel escrito: acordarse de todo y de todos. Feliz agosto. No se olviden demasiado.
Seguir a @AlmudenaHPerez
Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo