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ANÁLISIS DE ESPAÑA

El Podemos griego

Fotografía

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura3 min
España05-01-2015

A estas alturas sería absurdo negar que la única respuesta que ha articulado el Gobierno contra Podemos ha sido la del discurso del miedo. Y hasta ahora ese catenaccio político ha resultado fallido. En lugar de jugar al contraataque con ideas y propuestas, se ha optado por jugar a la defensiva contra un movimiento al que en un principio el oráculo de Rajoy calificó de friqui. El plan cambió al ver que esos friquis pasaban a encabezar encuestas hasta en lugares en los que ni siquiera se habían presentado aún. Seducidos en parte por la idea de que la subida de Podemos debilitaba aún más al PSOE, el Gobierno y el PP invitaron a la mesa a Pablo Iglesias. Desde entonces Podemos dejó de ser ignorado para ser una constante en las declaraciones de los dirigentes populares. El mensaje siempre el mismo: Pablo Iglesias y su partido son una especie de hombre del saco que viene a quitarnos todo lo que hemos conseguido (que es mucho o poco según con qué se compare). El último capítulo de esa estrategia basada en el discurso del miedo pasa por ligar a Podemos con Syriza, “el Podemos griego”. En este caso el apelativo no es una invención de sus enemigos. Son los propios de Podemos los que han puesto de ejemplo a seguir a la formación de izquierdas griega. Y parece que va a gobernar con consecuencias drásticas para todos en caso de que todas las partes cumplan con sus amenazas. Pero a partir de ahí a nadie se le escapa que la comparación machacona de Podemos con sus primos griegos encierra el deseo de ligar el futuro del partido de Pablo Iglesias a lo que se espera que pase en Grecia (salida del euro, sanciones, aislamiento, retirada de ayudas, caos...) Y es que este 2015 va a ser el año en el que Podemos está llamado a consolidar en las urnas lo que dicen las encuestas. En ese sentido, la campaña a favor y en contra de Podemos va empezar ya, en Grecia, dentro de unos días. La pregunta es si eso será suficiente. Como diría Ana Pastor en la entrevista en la que desnudó a Pablo Iglesias, la hemeroteca es muy traicionera. Podemos y Pablo Iglesias tienen muchos vídeos en youtube que matizar. Expresiones de las que arrepentirse. Desde sus viajes a Venezuela a sus charlas en herrikos. Pero lo cierto es que esos vídeos ya estaban ahí cuando la formación seguía creciendo en intención de voto de manera descomunal. Y es difícil de creer que de pronto una mayoría de españoles se sienta atraído por el modelo chavista o que coincidan con eso de que ETA fue la única que se dio cuenta del timo de la transición. Por ello el discurso del miedo no ha servido y podría no ser suficiente tampoco ni siquiera en el caso de que “el Podemos griego” resulte un desastre. En ese caso Podemos aún tendría tiempo incluso para dar marcha atrás como ha hecho en otras cosas. Su éxito se debe básicamente al fracaso de los grandes partidos. A un movimiento de venganza. Y ese deseo de muchos españoles de saldar cuentas en las urnas no se combate escondiéndose tras un discurso del miedo, sino dando la cara y presentando alternativas.

Fotografía de Alejandro Requeijo

Alejandro Requeijo

Licenciado en Periodismo

Escribo en LaSemana.es desde 2003

Redactor de El Español

Especialista en Seguridad y Terrorismo

He trabajado en Europa Press, EFE y Somos Radio