ANÁLISIS DE LA SEMANA
Cualquier tiempo pasado...
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad27-12-2001
¿...fue mejor? Para la sociedad española el 2001 no ha sido todo lo bueno que se deseó cuando sonaron las campanadas hace un año. Esta sección de La Semana.es ha reflejado casos sanitarios que han traído a los españoles de cabeza pero que no han acabado con la cabeza de la ministra Villalobos en una bandeja. Se pidió la dimisión de la ministra de Sanidad cuando sonaron públicamente los nombres de Lipobay, la fiebre aftosa, el mal de las vacas locas y los filtros para la hemodiálisis. Detrás de todos estos casos ha estado, de una forma u otra, el Ministerio de Sanidad. Ahora, con el cambio de año, Villalobos ha pasado el testigo a una compañera del Gobierno Aznar: Anna Birulés, ministra de Ciencia y Tecnología. Un científico español que investigaba la diabetes dice que se va de España porque no tiene marco legal para manipular embriones congelados. Como en casos similares, el debate ha saltado a la sociedad, con sus respaldos y oposiciones. Las quejas se han intensificado entre quienes reclaman un mayor apoyo económico y mejores infraestructuras y medios para investigar. Como el 2002 sea para Ciencia y Tecnología lo que ha sido este viejo 2001 para Sanidad, los españoles no sabrán si decir o no lo de “cualquier tiempo pasado fue mejor”. Menos mal que el Gobierno pone interés en otros aspectos. El maltrato de los niños o el cuidado de las personas mayores centran, respectivamente, un acuerdo del Ejecutivo con las comunidades autónomas y un estudio del CSIC. Un dulce entre tanto desastre. Otro consuelo es que no sólo España va mal –o menos bien de lo que dice Aznar-. Con motivo de la Navidad, el Papa ha llamado a la paz, para que sufran menos niños, aquellos que ni siquiera pueden oír la palabra amor en tiempos de guerra, violencia y desastre. Y aquí debajo, en las antípodas, Australia es presa de las llamas. Seguramente que en Sídney no se querrá recordar demasiado el 2001, porque posiblemente no fue mejor.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo