ITALIA
Los italianos vuelven a elegir el estilo bronco de ¬Il Cavaliere¬
Por Miguel Martorell
3 min
Internacional20-04-2008
Silvio Berlusconi ha vuelto al poder en Italia poco más de dos años después de que una coalición de izquierdas se lo arrebatara. Il Cavaliere ya ha anunciado la composición de su nuevo Gabinete y las primeras medidas que tomará, pero también ha realizado sus primeras declaraciones polémicas, a las que toda Italia ya está acostumbrada.
Silvio Berlusconi vuelve a dirigir el destino de Italia. Il Cavaliere y su Pueblo de las Libertades se impusieron por una amplia mayoría en las pasadas elecciones legislativas a la coalición de centroizquierda de Walter Veltroni. Italia vuelve al bipartidismo en el Senado y la Cámara de Diputados después del gobierno de dos años que encabezó Romano Prodi, y vuelve al particular estilo de gobernar de Berlusconi, que ya ha sembrado su primera polémica. Después de dos años en los que Prodi tuvo que lidiar más que con la oposición con sus propios aliados dentro del Gobierno, los italianos pedían estabilidad. Pero el hecho de que un nuevo ejecutivo de izquierdas volviera a caer antes de tiempo -sólo duró dos años- se notó en la movilización social en las elecciones y muchos prefirieron quedarse en casa, pese a poder votar en dos días consecutivos. La participación en los comicios cayó 3,2 puntos respecto a los comicios de 2006, hasta el 80,4 por ciento. El propio Veltroni fue el primero en reconocer su derrota frente a Berlusconi, al que advirtió de que conformará "un gobierno de oposición" que controlará al nuevo Gabinete de Il Cavaliere, con 130 senadores y 61 asientos en la Cámara de Diputados. La tercera fuerza política del país es, sorprendentemente, la Liga Norte de Umberto Bossi, un partido eminentemente racista y que cree en la secesión de los territorios ricos de Italia del empobrecido sur. Sin embargo, Berlusconi, con 168 senadores y 272 escaños en la Cámara de Diputados, no parece preocupado por las aspiraciones de sus aliados y consideró su victoria como "un gran resultado". A falta de anuncios oficiales, Il Cavaliere podría colocar a Gianni Letta como viceprimer ministro y al ex vicepresidente de la Comisión Europea Franco Frattini como ministro de Exteriores. El principal aliado de Berlusconi, Gianfranco Fini, tendrá la Presidencia de la Cámara de Diputados. En cuanto a las primeras medidas del tercer gobierno de Il Cavaliere, Berlusconi no defraudó y realizó uno de esos anuncios populistas a los que los italianos están tan acostumbrados. Así, aseguró que se trasladará a vivir a Nápoles y no abandonará la ciudad hasta que se haya resuelto el conflicto de las basuras, que se ha convertido en un asunto de emergencia nacional. De hecho, el primer Consejo de Ministros tendrá lugar en Nápoles, como muestra del interés de Berlusconi por resolver el problema. También está previsto que una de las primeras medidas del nuevo Gobierno de Il Cavaliere sea el apoyo a un consorcio cien por cien italiano para la adquisición de la compañía aérea Alitalia. En cualquier caso, Berlusconi ha vuelto y su estilo histriónico, también. Sus primeras declaraciones polémicas fueron, precisamente, respecto al nuevo Gobierno español de José Luis Rodríguez Zapatero, el primero en la historia democrática española que está formado por más mujeres que hombres. "Un Gobierno demasiado rosa" para Il Cavaliere. A juicio de Berlusconi, que debido a su debilidad por las mujeres italianas tuvo que pedir perdón a su esposa públicamente hace unos meses, un Gabinete como el de Zapatero no es posible en Italia, porque "siguen prevaleciendo los hombres". "Tendrá cierta dificultad en dirigir a tantas mujeres. Él se lo ha buscado", llegó a ironizar el nuevo primer ministro italiano. Unas declaraciones con ese tufo machista no podían quedar sin contestar en España, donde la secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE, Elena Valenciano, consideró que "en Italia, igual que en España, hay suficientemente mujeres preparadas y capaces de ser ministras u ocupar otras tareas de Gobierno". El ex vicepresidente Alfonso Guerra fue un paso más allá y cuando se le preguntó por las declaraciones de Il Cavaliere respondió: "¿Pero Berlusconi no es un delincuente?". Declaraciones al margen, Silvio Berlusconi ya tiene el reconocimiento de la Comunidad Internacional, y del propio Zapatero, quien le llamó para felicitarle por su victoria en las urnas.