TURQUÍA
Un islamista en la República laica
Por Miguel Martorell1 min
Internacional02-09-2007
El nuevo presidente de Turquía, Abdulá Gül, cuenta con una amplia carrera política a sus espaldas, más de 15 años militando en el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) y en sus predecesores. El peligro de islamización del Estado laico turco que ven algunos en Gül se justifica precisamente en ese pasado, ya que su vida política siempre ha estado relacionada con sectores islamistas conservadores del país.
Nacido en el seno de una familia conservadora y de clase humilde del centro de la Anatolia turca, el nuevo presidente de Turquía estudió Economía en la Universidad de Estambul y tuvo la oportunidad de desarrollar dos años de su carrera en Londres y Exeter, con lo que no desconoce los valores occidentales que introdujo en las ruinas del Imperio Otomano el general Kemal Ataturk, fundador de la República. Fue en sus años universitarios en los que Gül tomó contacto con políticos conservadores turcos y formó parte de la Millî Türk Talebe Birliði (Unión Nacional de Estudiantes Turcos), una asociación de corte islamista-nacionalista. Tras varios años trabajando en el Banco Islámico del Desarrollo, el actual jefe de Estado turco entró en la política a través del Partido de la Virtud en 1991. Continuó hasta 1999 con esta formación, hasta que ésta fue ilegalizada por el Tribunal Constitucional turco por sus violaciones de la Constitución, igual que su partido sucesor del que también formó parte, el Refah Partisi, especialmente del principio de secularización que establece la Constitución de la República. Posteriormente se convertiría en primer ministro con el Partido de la Justicia y el Desarrollo en las elecciones de noviembre de 2002, dada la prohibición legal que impedía al líder del AKP, Recep Tayyip Erdogan, ostentar el cargo. Como jefe de Gobierno, Gül modificó la Ley y dejó el puesto de primer ministro en favor de su correligionario. Ahora, Erdogan parece haber devuelto a Gül el favor que éste le hizo en 2003. El actual primer ministro turco ha sido uno de los principales defensores de la candidatura de Gül como presidente de la República y no ha dudado a la hora de defender su gestión como ministro de Exteriores y su ideología de corte islamista.