LEGISLACIÓN
Nueva ley de OPAs a la vista
Por Mayra Ambrosio L.
1 min
Economía11-02-2007
Yo opo, tú opas, él opa: lanzar una Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA) se ha convertido, en los últimos tiempos, en algo común. Día a día se ve como multinacionales o empresas grandes lanzan ofertas agresivas, y compiten por hacerse con el control de otra entidad. El ejemplo más reciente está en la rocambolesca historia de Endesa, en la que un caballero nacional y otro extranjero se disputaban el amor de una enérgica princesa.
El contexto no podía ser más idóneo para que el Gobierno emprendiera una reforma de la ley de OPAs. Quizás lo sorprendente es que, en esta materia, el PSOE y el PP han alcanzado un principio de acuerdo sobre el proyecto. Dos son las principales novedades expuestas en el texto: en primer lugar, se obligará de forma inexorable a lazar una OPA por todo el capital cuando se supere el umbral del 30 por ciento del control. La segunda innovación se refiere al control real del consejo. Para el PP, lo ideal sería que la OPA se tuviera que realizar a partir de la obtención de un tercio del consejo de administración. Según su portavoz de Economía, esta iniciativa tiene como finalidad “evitar que alguien tenga tentación de controlar una empresa comprando menos del umbral exigido para lanzar la oferta”. ¿Qué ocurrirá con los titulares que tengan una participación superior al 30 por ciento, cuando entre en vigor esta ley? El Gobierno ha previsto que, tanto para este nivel como para un segundo fijado en el 50 por ciento, habrá una disposición transitoria que obligará a lanzar una OPA por el 100 por ciento del capital si se incrementa la participación en, al menos, un cinco por ciento en 12 meses, o bien, si se alcanza un control superior al 50 por ciento. Este doble límite choca con el principio de umbral único procedente de una directiva de la Unión Europea. Si no hay inconvenientes de última hora, la ley entrará en vigor en primavera y se verá si sirve para frenar tanta tentativa de compra, que al final sólo lleva a un escenario de incertidumbre.