Estados Unidos sufre su peor tasa de paro en 20 años
Por Gema Diego2 min
Economía04-11-2001
El miedo a la recesión económica se extiende como la pólvora entre empresarios y consumidores. Los atentados del 11 de septiembre han provocado que los estadounidenses pierdan la confianza en su economía y que consuman menos. A esto, se ha unido un aumento de medio punto porcentual en la tasa de paro.
El desempleo ha pasado de afectar a un 4,9 por ciento de la población activa a cebarse sobre el 5,4 por ciento de ésta. Es decir, 415.000 trabajadores estadounidenses han perdido su puesto de trabajo en octubre. Por sectores, los más perjudicados han sido los empleados de la industria, las aerolíneas y las agencias de viajes. Por colectivos, la tasa de paro ha subido entre los hispanos un 0,8 por ciento, entre los negros un uno por ciento y entre las mujeres un 0,4 por ciento. En Japón las cosas no están mejor. Para un país que se ha movido siempre con tasas de paro del uno y del dos por ciento, alcanzar ahora el 5,3 por ciento le hace precipitarse en una "situación de emergencia". Así lo ha reconocido el ministro de Salud, Trabajo y Bienestar, Chikara Sakaguchi, que ha advertido que la situación empeorará, ya que el Gobierno ha apremiado a la banca para que acabe con una serie de créditos sin pagar que arrastra desde hace 10 años. Se prevé que esta medida empuje al sector hacia una ola de bancarrotas y despidos que contribuyan a incrementar el número de desempleados. Pero, si las perspectivas de Japón son bastantes oscuras, los consumidores estadounidenses tampoco tienen mucha fe en su Gobierno para que le saque las castañas del fuego. El índice de confianza de este país, que elabora el Conference Board mediante una encuesta mensual a 5.000 hogares, ha caído 11 puntos en octubre. Esta bajada se suma a los 16 puntos de septiembre, con lo que el índice se sitúa ahora en 85,5 puntos. Al final del gobierno de Clinton, hace un año, este índice rozaba los 136 puntos. Según Lynn Franco, directora del centro de investigación del Conference Board, "los despidos y el aumento de la tasa de desempleo no hacen pensar en una próxima recuperación de la confianza". Esta mala racha también ha afectado al consumo, que ha sufrido su mayor caída en 30 años, un 1,8 por ciento.