JUSTICIA
Las asociaciones de fiscales y la AVT chocan por el cese de Fungairiño
Por Enrique García García1 min
España11-02-2006
La Asociación de Fiscales (AF) se enfrenta a la Asociación Progresista de Fiscales (APF) en su reclamación de que el Fiscal General del Estado, Conde Pumpido, dimita de su puesto. El Malestar de la AF tienen su origen en la decisión de Pumpido de hacer dimitir al fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño.
Fungairiño presentó inicialmente su dimisión y solicitud de traslado por “motivos personales” sin embargo, el asunto no resultó ser tan sencillo. Poco después, el Fiscal General, Conde Pumpido, reconocía haber presionado a Fungairiño para dimitir. Defendió esta postura alegando que este le había desobedecido en varias ocasiones, y que necesitaba a un fiscal con el que pudiera conectar. La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) se ha lanzado a la defensa del Fiscal de la Audiencia Nacional, y acusa al Gobierno directamente de estar haciendo limpieza en el poder judicial por cuestiones ideológicas. La Asociación de Fiscales también se ha sumado a esta defensa cerrada de Fungairiño, alabándolo por su labor en la lucha contra ETA. La misma asociación se negó en su momento a acudir siquiera a la toma de posesión de Fungairiño, cuando fue nombrado Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional. Le consideraban poco preparado para el cargo y un candidato más próximo a la APF. La AVT por su parte, organizó una concentración a favor del cesado, con alrededor de un millar de asistentes. Durante la misma, se lanzaron consignas e insultos contra el presidente del Gobierno, y se pronunciaron discursos admirativos hacia Fungairiño. La víctima Irene Villa hubo de aprovechar su actuación junto al presidente de la AVT, Francisco José Alcáraz, para remarcar que el acto era un homenaje hacia el ex-fiscal, y no una concentración política contra el Gobierno. De Fungairiño, villa destacó su “fidelidad extrema al Estado de Derecho, su máxima honradez, no dejándose amilanar por intereses partidistas, y su dedicación absoluta a su profesión y a los intereses públicos”.