ANÁLISIS DE LA SEMANA
Primavera de flores y cardos
Por Almudena Hernández
1 min
Sociedad20-03-2005
Es primavera. Sí, ahora sí. Aunque llevemos días de frío invernal escuchando mensajes publicitarios que nos decían que ya habíamos cambiado de estación. Ahora. Ahora es cuando ha llegado y no antes, cuando nos explicaban cuáles eran las tendencias de esta temporada. Muchos saben que es primavera porque les pica la nariz. Y, claro, con tanta molestia no se puede husmear qué está haciendo la vecina en la barbacoa, si pinchos morunos o sardinitas. Éso si la vecina se ha quedado en casa y no se ha dado el piro de vacaciones de Semana Santa. El Gobierno de Zapatero parece vivir eternamente en primavera. Y, si no, se adelanta, como la publicidad, aunque meta la pata y luego venga una ola de frío polar. Días antes de entrar la primavera el Congreso de los Diputados comenzó a tramitar la ley de las uniones homosexuales. Sí, esa a la que el presidente de los españoles quiere poner un clavel en la solapa para que una pareja de dos personas del mismo sexo se llame matrimonio. Es igualito que enmarcar el primer gurrapato que el niño hizo en el colegio y considerarlo Las meninas. Muchos españolitos de a pie se preguntan cuántos años tendrán que pasar para que los políticos dejen de caer cada vez más bajo. Algunos van en picado. Aunque todavía hay especímenes que superan a nuestros representantes. Algunos deleznables sujetos se han querido apropiar de la primavera de unas pobres criaturas inocentes. Dan asco esos presuntos criminales detenidos en una operación internacional contra la pornografía infantil. Es lo que tiene la primavera: que junto a las flores tiernas brotan también los cardos.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo