EDUCACIÓN RELIGIOSA
Cuatro profesoras no pueden enseñar por su comportamiento "desacorde" con el Catolicismo
Por Javier Bragado2 min
Sociedad07-09-2001
Septiembre es el mes de la vuelta al colegio para muchos niños y maestros, aunque algunos no han podido retornar a las clases aunque este era su deseo. Cuatro profesoras de religión de diferentes lugares de España deseaban llevar a cabo sus tareas docentes pero su contrato laboral no ha sido renovado, debido al rechazo de la Iglesia, una institución que cuenta con la potestad de nombrar a los profesores de religión por ley.
El primer caso de los cuatro conocidos hasta ahora por este motivo es el de Resurrección Galera. Maestra en un centro de Almería, aún no ha recibido la comunicación oficial de su no renovación y decidió volver al colegio la semana pasada como medida de protesta. Cuenta con el apoyo de numerosas instituciones y partidos políticos e incluso los padres de todos los alumnos del colegio han acordado matricular a sus hijos en la asignatura ética -opción que se ofrece como alternativa de religión-, para que no haya ningún alumno de la materia que impartía. Resurrección está casada con un divorciado y según el delegado diocesano de Educación de Almería, Antonio Rueda Moreno, las clases deben ser impartidas por profesores con una vida compatible con el espíritu de la Iglesia. En Málaga, Francisca Urbano, maestra de religión en Monda desde hace diez años, tampoco ha sido renovada. Se reunió con el delegado diocesano de Enseñanza de Málaga, Victoriano Planas y este le explicó que su despido se basaba en que "no iba a misa y salía de copas" y "no participaba de las actividades de la Iglesia". Además, el obispo de Málaga, Antonio Dorado, añadió posteriormente que ella defendía la ley del divorcio y del aborto. Por su parte, Francisca, asegura que va a misa regularmente, habla con sus compañeros tras el trabajo por compañerismo y amistad, que tiene "hasta cartas de los párrocos del pueblo" que acreditan su participación en las actividades de la parroquia y que está en contra tanto de la ley del aborto como de la del divorcio. En Málaga también se ha conocido otro caso de una profesora a quien no han renovado su contrato por no estar casada por lo civil. Y además, en Gran Canaria, una maestra que impartía clases desde hace quince años fue obligada a dejar su trabajo una vez iniciado el curso porque según el Obispado de Canarias "convivía con el pecado", porque vivía con un divorciado.