ANÁLISIS DE LA SEMANA
Los fantasmas de ¬Halloween¬
Por Almudena Hernández
1 min
Sociedad31-10-2004
Están sueltos, todo el año. Se esconden bajo la sábana de la ignorancia, del dejarse llevar, de lo que está de moda. Haberlos hailos, son de carne y hueso y permiten que otros miren a los astros para atraer a los espíritus. No saben que en muchos juegos hay peligros, por lo menos el de quedarse vacío. Halloween se ha puesto de moda y al que defiende la fiesta de los santos -que no es la misma que la de los difuntos- en vez de la de los fantasmas es un carca. Curiosa conclusión cuando la cultura y tradiciones españolas están de moda fuera de las fronteras de este bendito país. Mientras los jóvenes -y no tan jóvenes- se disfrazan de muertos vivientes, el Gobierno quiere que la investigación científica convierta los laboratorios en cementerios. Las verdades a medias y las falsas esperanzas a los enfermos hacen que la opinión pública piense en una sóla dirección, la del talante intolerante, la del progreso de los cangrejos. En cada situación habría que tener en cuenta los argumentos que se dan tanto a favor como en contra y no esconderse bajo las sábanas, pues luego, cuano uno las levanta a veces se lleva sorpresas y encuentra un hombre más pequeño que lo que había imaginado. Sobre todo en comparación de otros, que sólo utilizan las sábanas para pedir la paz y ayudar a quienes más lo necesitan pues, al igual que las modas, las injusticias no tienen fronteras. Al menos el mito de don Juan Tenorio, además de picaresca, zalamería y engreimiento, tenía un buen fin: el amor. Pero el fin no justifica los medios.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo