Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

GIRA EUROPEA

Bush y Putin acuerdan el fin de la Guerra Fría

Por David HurtadoTiempo de lectura2 min
Internacional25-05-2002

"Ha terminado la era en que nos veíamos como enemigos". De esta forma, los máximos dirigentes de Rusia y EE.UU. ponían fin, según sus propias palabras, a la Guerra Fría y pasaban a tener una relación de "aliados". En la declaración sobre las "nuevas relaciones estratégicas" se prevé la reducción de los arsenales nucleares heredados de los antiguos conflictos.

La reducción se materializará dentro de los próximos 10 años y supondrá la disminución en dos tercios de las bombas nucleares actuales. Así, se pasará de las 6.000 permitidas hasta ahora a una cifra que rondará entre las 1.700 y las 2.200 ojivas nucleares, material suficiente, pese a todo, para destruir el planeta. Ante la cuestión de un periodista a George W. Bush sobre la posibilidad de acabar con la totalidad de las armas nucleares, el presidente estadounidense dejó claro que eso es algo actualmente fuera de las posibilidades: "No sabemos lo que puede ocurrir dentro de 10 años". Con este nuevo acuerdo, los dos antiguos rivales se presentan ahora como aliados en la lucha mundial contra el terrorismo internacional. Pese a ello, las principales tensiones diplomáticas entre ambos países se centran en la distinta visión sobre el llamado eje del mal formado por Irán, Irak y Corea del Norte. Esto se debe a la relación que Rusia mantiene con el Gobierno iraní, basada, principalmente, en la construcción de centrales nucleares en suelo de Irán, algo que EE.UU. está tratando de evitar. Es también la visión sobre la lucha contra el terrorismo mundial lo que separa a EE.UU. de Europa. En su visita la pasada semana a Alemania hubo demandas por ambos lados. Bush pidió más colaboración a sus aliados europeos en la disputa frente al eje del mal, mientras que los mandatarios europeos exigen al Gobierno estadounidense ser tratados como verdaderos aliados y no como "satélites". En su reunión con el canciller alemán, Gerhard Schröder, el presidente Bush aseguró que consultaría a Europa antes de llevar a cabo iniciativas contra Irak. La reunión entre Bush y Putin ha dado más de sí, ya que la normalización de las relaciones ha llegado también al terreno económico. Bush ha pedido al Congreso de su país que se levante el acuerdo de 1974 Jackson-Vanik, por el cual se establecen restricciones al comercio con Rusia. Moscú tratará de conseguir el estatuto de economía de mercado, con el cual normalizará sus relaciones económicas con EE.UU. y favorecerá sus exportaciones.