Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

CATÁSTROFE HUMANITARIA

Haití, devastada por una tormenta tropical

Por Berta BaronaTiempo de lectura2 min
Sociedad26-09-2004

La noche del 18 de septiembre, la tormenta tropical Jeanne devastó Haití dejando, según los últimos balances, 1.316 muertos, 1.097 desparecidos y 3.000 heridos. Unas cifras que aumentan a medida que se encuentran más cuerpos bajo el lodo.

Por segunda vez este año, Haití ha sido arrasado por fenómenos meteorológicos. En mayo cayeron lluvias torrenciales de las que no se ha recuperado. En esta ocasión ha sido Jeanne, una tormenta tropical de categoría tres en la escala de Saffir-Simpson que ha sobrepasado los 150 kilómetros por hora y ha dejado el país destruido, sobre todo la localidad de Gonaives, al noroeste. Haití es el país más pobre de América. Es posible ayudar a sus habitantes ingresando dinero en cuentas habilitadas por ONG como Manos Unidas o Cáritas Española. Gonaives se ha convertido en un lodazal en el que se hallan restos de viviendas, animales muertos, coches, pertenencias de los haitianos y cadáveres y que ha sepultado los caminos y las carreteras. Esto dificulta la distribución de la ayuda humanitaria, ya de por sí complicada por la desorganización existente y la desesperación de los 250.000 afectados. La necesidad les empuja a lanzarse a los camiones en marcha y apoderarse de la comida, el agua, la ropa y los medicamentos que están llegando desde diversos países del mundo. Ante esta situación, las tropas de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTHA) en ocasiones han tenido que disparar al aire y lanzar botes de humo para evitar las avalanchas. Al mismo tiempo existen grupos armados y funcionarios corruptos que quieren apropiarse de las partidas. Para coordinar el suministro de esta ayuda se ha creado un comité mixto presidido por el ministro de Defensa, Herald Abraham. Hay un gran riesgo de epidemias por la cantidad de cadáveres humanos y de animales concentrados. Pero muchos haitianos beben agua de los ríos contaminados de cuerpos en descomposición poniendo en peligro su salud. Las autoridades están estudiando evacuar la zona para evitar las enfermedades. El hospital general de Gonaives está destruido y la ayuda médica procede de Médicos del Mundo y otras organizaciones.