NUEVO GOBIERNO
Zapatero ordena volver a las tropas en Iraq en su primera decisión como presidente
Por Pablo A. Iglesias2 min
España18-04-2004
Primer día como presidente, primera decisión y primera controversia. José Luis Rodríguez Zapatero ha puesto fin a la misión de las tropas españolas en Iraq. Tienen que regresar "en el menor tiempo y con la mayor seguridad posible". Esa es la orden del nuevo jefe del Ejecutivo al día siguiente de prometer su cargo ante el Rey.
Zapatero ha cumplido mucho antes de lo previsto su deseo de que España abandonara Iraq. Hace un año se opuso a la intervención de Estados Unidos contra Sadam Husein. Rechazó el apoyo político de José María Aznar a George W. Bush. Criticó el envió de tropas a la zona. Reclamó que Naciones Unidas tomara el mando. Y, ahora, nada más tomar posesión de su cargo como presidente del Gobierno, ha dado orden de que los militares vuelvan cuanto antes. A su juicio, nada hace prever "una variación sustancial en la situación política y militar existente en Iraq en los plazos previstos y en el sentido reclamado por el pueblo español". Por ello, quiere que el Ejército regrese "a casa" al mismo tiempo que se compromete a "seguir apoyando firmemente la estabilidad, la democratización, la integridad territorial y la reconstrucción de Iraq". Zapatero espera contribuir así a impulsar la lucha contra el terrorismo "desde el más estricto respeto a la legalidad internacional". Sin embargo, la vuelta de las tropas llega al mes de los atentados del 11 de marzo, que Osama bin Laden ha justificado como una respuesta a la presencia de tropas españolas en Iraq. Recientemente, los terroristas del 11-M habían amenazado con más atentados al nuevo gobierno si los soldados permanecían más tiempo en el país de Sadam Husein. La palabra dada por Rodríguez Zapatero vaticinaba el regreso de las tropas de Iraq si Naciones Unidas no tomaba el mando del país antes del 30 de junio. Pero el nuevo presidente ni siquiera ha esperado a que concluya el mes de abril y, al día siguiente de prometer su cargo, ha exigido la vuelta a España de los soldados. No obstante, la orden podría tardar varios días, incluso semanas, en cumplirse. La gran inseguridad que vive la región y los ataques de los rebeldes podrían suponer un peligro mayor para el Ejército en la misión de regreso que su propia estancia allí.