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Duelo por la izquierda

Por Raquel Teresa DelgadoTiempo de lectura3 min
España29-11-2003

Quince días después de las elecciones autonómicas catalanas, Jordi Pujol aún no sabe si cederá el puesto a su compañero de partido Artur Mas o si el socialista Pascual Maragall abrirá un Gobierno de izquierdas en Cataluña. Ambos se esmeran por conseguir los 23 escaños de Esquerra Republicana, la clave para el futuro President.

Ni Convergencia i Unió (CiU) ni los socialistas están dispuestos a renunciar tan fácilmente al Govern. Los primeros no quieren bajarse del carro y los segundos ya han afirmado que “no contemplan estar en la oposición” y que desean “comenzar las negociaciones con ICV, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Iniciativa per Cataluña – Els Verds (ICV) de inmediato”, para llegar a un “gobierno progresista y catalanista que sea sólido y estable”. Tras la lucha por los votos continúa la batalla por las negociaciones. Los socialistas apuestan claramente por un Gobierno de mayoría progresista antes que por un Gobierno de mayoría nacionalista, que resultaría del pacto entre CiU y los republicanos. José Montilla y Ernest Maragall, por parte del PSC, y Joan Puigcercós y Ernest Benach, por ERC se mostraron de acuerdo con un nuevo Estatut, la reforma de la financiación autonómica, una ley electoral catalana y una nueva legislación sobre los medios de comunicación públicos. “Las discrepancias”, señalaron las dos delegaciones, “son salvables”. De hecho Puigcercós, explicó que ya se está negociando la cuantificación de partidas presupuestarias. Otra de las discrepancias es el modelo de Gobierno. El PSC sólo acepta un tripartito de izquierdas mientras que Esquerra sigue apostando por un Ejecutivo con CiU y el PSC, aunque no lo descartan con la negativa de estos últimos a la invitación concreta de negociaciones a inicios de esta semana. Por su parte, CiU, gracias a que consiguió más escaños, podría seguir en el Gobierno si consiguiera los escaños de ERC, dejando fuera a ICV. ERC no quiere aliarse con Artur Mas si a nivel nacional pacta con el PP e incluso estaría dispuesto a formar un gobierno de concentración nacional que aglutinara a todos los partidos sin contar con los populares. Los negociadores de CiU, Josep Antoni Duran Lleida y Pere Macias, han reiterado a los republicanos que por ellos “no quedará”. Están dispuestos a hacer “todo lo posible” para gobernar con ERC y están de acuerdo con el gabinete de concentración si Carod-Rovira insiste en pedirlo. Para ello, han redactado un documento marco por un Gobierno de coalición CiU-ERC dividido en siete ámbitos, que recoge medidas en materia social y económica, básicamente el programa electoral de Mas, y también refleja las propuestas de nuevo Estatut, la negociación de nuevo modelo de financiación pero no menciona uno de los puntos en los que Esquerra pone más énfasis, el esclarecimiento de los casos de corrupción que afectaron al Govern en la última legislatura. Sabiendo eso, los socialistas se han adelantado a presentar un documento a ERC e Iniciativa en el que se compromete a “aclarar completamente los casos de corrupción e inicios de irregularidades que se hayan podido producir en el pasado” y a votar igual en “Cataluña, España y Europa”. CiU también ha ofrecido a ERC la mayoría absoluta en la mesa del Parlament, dejando abierta la posibilidad de negociar la presidencia, tal y como quería Carod-Rovira. Los dos grandes de Cataluña luchan por ella.