Saltarse el Pacto de Estabilidad es ilegal
Por Silvia Rueda Ibáñez
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Economía30-11-2003
Francia y Alemania son los niños traviesos de la UE. Después de negarse a llevar a cabo esfuerzos para reducir su déficit público, estos dos países están en el punto de mira de la CE. El Pacto de Estabilidad se ha suspendido.
Ha sido la decisión del Consejo Ecofin para actuar en beneficio de Alemania y Francia, con el apoyo de la presidencia italiana de la Unión. Ya en enero, los quince activaron la alarma de déficit excesivo contra Alemania. En el 2002, su déficit público superaba el límite permitido de la Unión con un 3,1 por ciento (tres por ciento permitido). Para el 2004 se esperaba que lo situara por debajo del límite, reduciéndolo ya en el 2003 en un uno por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). Ahora, las palabras se las ha llevado el viento y la realidad no ha cambiado. Desde hace al menos un mes, Berlín ha intentado paralizar los procedimientos que el comisario de Asuntos Económicos y Monetario, Pedro Solbes, amenazaba con poner en marcha. Se trataba de impedir que la Comisión Europea pusiera bajo vigilancia sus cuentas públicas, según exponía un dictamen del servicio Jurídico del Consejo de la UE elaborado hace un mes a petición de Alemania. “Violación del derecho de iniciativa de la comisión”, esto es lo que afirman los expertos ante la modificación de las propuestas de la Comisión por el Consejo de Ministros, según el documento firmado el 30 de noviembre. Berlín opta por ampararse en el Tratado de Niza con el apoyo activo de la presidencia italiana. Alemania obliga incluso a Francia a sumarse a la decisión, según los diplomáticos. Francis Mer, ministro galo de Economía, estaba dispuesto a aceptar la nueva etapa en el esfuerzo de consolidación exigido en el 2004, con el que Solbes estaba de acuerdo con los cambios, según fuentes comunitarias. Pedro Solbes ve muy difícil recurrir el acuerdo al tratarse de un "acto político y no jurídico que no está reglado". No obstante, Solbes no ha descartado que la Comisión recurra la decisión adoptada por los ministros de finanzas de la UE.