El Ejecutivo iraquí anuncia que la ocupación acabará antes de junio
Por Chema García
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Internacional25-11-2003
El presidente del Consejo de Gobierno iraquí, Jalal Talabani, comunicó el pasado martes al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que la Autoridad Provisional de la Coalición (CPA), englobado por las fuerzas ocupantes, se disolverá antes de junio de 2004 y devolverá la soberanía al pueblo de este país.
El anuncio del calendario de transferencia fue presentado tres semanas antes de lo previsto. El CPA, cuyos miembros fueron nombrados por EE.UU., acordó hace unos días, junto a las fuerzas ocupantes, acelerar el traspaso de poderes a los iraquíes. El Consejo solicitó a la ONU mediante una carta, que apruebe una resolución que valide a la nueva situación. La propuesta de la administración provisional iraquí incluye la creación de una “ley básica” para Iraq antes de febrero de 2004, que contenga principios ausentes hasta ahora, como el respeto a los derechos humanos y la igualdad de los ciudadanos. La libertad de religión también estará contenida en la mencionada ley, aunque se reconocerá la identidad islámica mayoritaria del pueblo iraquí. Además, recogerá la separación de poderes, cierto grado de descentralización administrativa de los gobiernos regionales para atender a la minoría kurda, el control de la población civil bajo la autoridad de la armada y de las fuerzas de seguridad iraquíes, así como las bases para elegir, antes de mayo de 2004, un cuerpo legislativo provisional donde estén representados “todos los segmentos de la población iraquí”. Un mes después, en junio, el mencionado cuerpo legislativo nombrará un ejecutivo provisional y en ese momento se disolverá el CPA. Talabani explicó días después al propio Consejo de Gobierno, que es necesario “enmendar” el plan estadounidense para acelerar la transferencia de poder a los iraquíes porque considera que el proyecto de la Casa Blanca no satisface las aspiraciones de la mayoría chií del país. Talabani llegó a esta conclusión después de entrevistarse con el guía espiritual de esta comunidad, Alí Al-Sistani, quien le transmitió su impresión de que Washington ha tenido más en cuenta las peticiones de la minoría kurda -una quinta parte de la población- que las de la comunidad chií.