COLOMBIA

Fracaso del referéndum planteado por Uribe

Por Txema García2 min

Internacional27-10-2003

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, sufrió un duro revés a su confianza después de que el referéndum celebrado el pasado sábado 25 en su país, resultase un fracaso. De las 15 preguntas hechas a los colombianos, prácticamente ninguna alcanzó el umbral de algo más de 6,2 millones de votos exigidos para su validez. El ministro del Interior, Fernando Londoño, ofreció su dimisión tras la consulta.

La gran abstención registrada es capital para entender los resultados. El hecho de que se diesen votaciones paupérrimas, en zonas en las que tradicionalmente se registra una alta participación, provocó que el porcentaje final de votantes estuviese entre el 22 y el 24 por ciento. La jornada electoral fue doble, ya que por un lado se preguntaba sobre reformas para luchar contra la corrupción y el recorte de los gastos públicos; y por otra, se elegían alcaldes, concejales, gobernadores y diputados regionales: La principal novedad de las elecciones locales y regionales fue la aparición en el escenario político de candidatos de nuevas formaciones como el Polo Democrático Independiente, Nuevo Partido, Colombia Viva o Colombia Democrática. Precisamente, Luis Eduardo Garzón, candidato de uno de estos nuevos partidos -el Polo Democrático- obtuvo la victoria en la capital del país, Bogotá. El político izquierdista aseguró que desarrollará un “proyecto alternativo”. “Lucho” Garzón, como es conocido el político y ex sindicalista, obtuvo 699.990 votos mientras que su principal oponente, Juan Lozano, logró 600.390. Garzón fue dirigente de la Unión Sindical Obrera (USO), que agrupa a los trabajadores de la estatal Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol); presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), y representante de los empleados colombianos ante la Organización Internacional del Trabajo. Por otra parte, la liberación de los siete turistas extranjeros, que estaba prevista para esta semana, quedó finalmente parada por culpa de que el Gobierno del presidente Uribe y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) no consiguieron concretar un acuerdo definitivo sobre la forma de libertarles. Entre los secuestrados se encuentra el español Asier Huegun Etxeberria, a quien la guerrilla pretendía dejar libre el primero. En las negociaciones intermedió una comisión de la Iglesia Católica. Los insurgentes exigen que se reconozca la crisis humanitaria que viven los pobladores de la Sierra Nevada de Santa Marta, al norte del país, donde ocurrió el secuestro el 12 de septiembre. El ELN deseaba liberar de manera gradual a los rehenes, pero el Ejecutivo reclamó que se hiciera en una sola vez para facilitar el operativo. Los turistas fueron hechos cautivos cuando visitaban Ciudad Perdida, ruinas arqueológicas indias en la Sierra Nevada de Santa Marta, a unos 1.000 kilómetros al norte de Bogotá.