HISTORIA
Hallan en Gerona el mayor fondo de manuscritos hebreos de Europa
Por Eliane Hernández Montejo
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Cultura17-03-2003
El Archivo Histórico de Gerona ha resultado esconder en su interior un auténtico tesoro, lo que podría ser el mayor fondo de manuscritos hebreos que se conserva en Europa. Alrededor de un millar de textos, la mayor parte de ellos del siglo XIV y XV, han aparecido formando parte del relleno de las cubiertas de algunos libros.
La importancia de este conjunto de manuscritos va más allá de su carácter bibliográfico, ya que la comunidad judía siempre estuvo perseguida lo que provocó que no pudieran guardar adecuadamente sus fondos. Además, los manuscritos de Gerona permitirán conocer las actividades cotidianas de la comunidad judía, que habitualmente se mantenía aislada del mundo exterior. Según explica el director de este archivo, Josep Matas, el descubrimiento fue posible por la casualidad del deterioro de una cubierta de un libro que dejó al descubierto un fragmento de un documento que había sido utilizado como relleno de la tapa. Esto motivó que los técnicos del archivo comenzaran una investigación entre los distintos libros que conservan, lo que ha permitido localizar 165 volúmenes que también contienen en el interior de sus cubiertas manuscritos antiguos. Los manuscritos están escritos en hebreo sefardí y se trata, en su mayoría de actas notariales, contratos de compra-venta, certificados matrimoniales o versiones de La Torá (libro sagrado hebreo). Estos textos proceden de las numerosas escribanías que funcionaban en Gerona en los siglos XIV y XV, donde habitaba una importante, rica y burocrática comunidad judía. Josep Matas explica que en el año 1492, cuando los judíos tuvieron que huir precipitadamente, abandonaron toda esta documentación, que luego fue utilizada por los encuadernadores de la época para dar grosor, resistencia y flexibilidad a las cubiertas. Así, en cada una de las tapas se calcula que hay entre 30 y 60 manuscritos ocultos. "El hecho de que las tapas estén recubiertas de pergamino ha permitido que los documentos que hay en su interior estén muy bien conservados y ahora la dificultad estriba en desencolarlos sin dañarlos, aunque ya hemos hecho pruebas con algunos restauradores y es factible hacerlo", dice el director del archivo.