UNIÓN EUROPEA
El objetivo de los Quince es restaurar el ‘papel fundamental de la ONU’
Por Ángela González Rodríguez2 min
Internacional23-03-2003
Mientras los dirigentes de la Unión Europea (UE) se reúnen en Bruselas, las bombas siguen cayendo sobre Irak. La guerra es un hecho que no se puede obviar, como bien han entendido los jefes de Estado y de Gobierno europeos.
Pese a la palpable tensión, la Cumbre de Primavera que han celebrado los dirigentes de los países miembros de la UE, ha girado en torno a la búsqueda de puntos de acuerdo que reunifiquen la maltrecha política exterior común europea de los últimos meses, al igual que en la creación de un plan de reconstrucción de Irak una vez finalizado el conflicto. Como resultado de tres horas de reunión de los directores políticos de los Estados miembros y otras dos de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE, se ha elaborado un texto que defiende la vuelta al protagonismo de las Naciones Unidas. El presidente del Consejo Europeo, Costas Simitis, fue quien hizo oficial lo pactado en esta reunión comunitaria. Simitis señaló que los Quince han optado por incidir en aquello que les une, en vez de en las "divergencias serias de puntos de vista", ya que: "Las opiniones opuestas no pueden desaparecer como por encanto, ni podemos hoy tampoco borrar esas divergencias". Esta es la razón de que todos los miembros hayan decidido "volverse hacia el futuro". Y ese futuro pasa por abordar "temas trascendentales" tales como la necesaria cooperación internacional y las relaciones entre la UE y Estados Unidos. En cuanto a los acuerdos que se han tomado durante esta Cumbre, van dirigidos a restaurar y reforzar el papel protagonista de la ONU: "Seguimos pensando que las Naciones Unidas deben continuar jugando un papel central durante y después de la crisis actual. El sistema de Naciones Unidas tiene la capacidad y la experiencia necesaria para coordinar la ayuda y la asistencia de los países en el post conflicto". Asimismo, los Quince coinciden en señalar que están "determinados" a fortalecer la capacidad de la UE en el contexto de la política exterior común y de defensa. "Debemos mantener nuestro proyecto a pesar de las diferencias", resaltó Simitis. "Queremos -recalcó-que la UE haga oír su voz. No podemos confiar a los demás nuestra defensa, que otros determinen nuestra política exterior". En esta misma línea se encuentran las declaraciones del presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, quien hizo hincapié en que a la UE no le interesa "continuar delegando en otros la defensa de sus valores por la vía militar". Para finalizar, subrayó que no se puede "confiar la riqueza de Europa y su seguridad a los demás" y que esta idea ha sido entendida por todos los Estados miembros "cualquiera que haya sido la carta que hayan firmado antes de estos acontecimientos". "Estamos juntos en esto", insistió. No obstante, esta última idea no ha convencido a Alemania, Francia y Bélgica, cuyos líderes anunciaron su intención de celebrar en abril una cumbre tripartita en la que se abordará el futuro de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y la Política Europea de Seguridad y Defensa (PESD) de la UE.