ABUSO SEXUAL
Nuevo escándalo en la Iglesia Católica estadounidense
Por Celia Pareja1 min
Sociedad31-01-2003
La imagen de la Iglesia católica estadounidense ha quedado gravemente dañada una vez más por los nuevos casos de abuso sexual a menores. La Archidiócesis de Boston es la más castigada, donde siguen aumentando las presiones para que el cardenal, Bernard Law, renuncie a su puesto.
Las nuevas denuncias apuntan a la complicidad de la Iglesia estadounidense en el encubrimiento de los hechos. En los últimos años, la Iglesia se ha visto sacudida por una serie de escándalos relacionados con sacerdotes pederastas. En Estados Unidos hay más de 450 denuncias por abuso sexual de sacerdotes en ejercicio. Lo llamativo es que la Iglesia ha encubierto los casos y ha permitido a los clérigos denunciados continuar con el ministerio. Lo único que se hizo en algunas ocasiones fue trasladarlos a parroquias de otras ciudades. Proteger la imagen de la Iglesia y la necesidad de retener párrocos ante la falta de vocación han influido en el secretismo. Las últimas denuncias y, sobre todo, un documento de 800 páginas presentado por Greg Ford, presunta víctima de un sacerdote de Boston, han hecho reconocer a la Iglesia su error. En el documento se prueba que la jerarquía católica de Boston sabía de los abusos pero no hizo nada al respecto. La Archidiócesis de Boston ha admitido que su política respecto a las acusaciones de abusos sexuales fue "inadecuada" en el pasado y prometió que a partir de ahora habrá "tolerancia cero" hacia dichos abusos. El Papa Juan Pablo II manifestó estar "muy herido" por el escándalo en ese país. El Pontífice aseguró que ayudará a la Iglesia Católica de los Estados Unidos a salir de la crisis y a implementar estas nuevas políticas para evitar los casos de abuso sexual a menores.