PREVISIONES
El diagnóstico de la OCDE rebaja el crecimiento de España
Por José Martín de Bernardo 2 min
Economía24-11-2002
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) recoge en su último informe las previsiones para la economía española. El crecimiento económico será del 1,8 por ciento en el 2002 y no del 2,1 por ciento como había anunciado anteriormente.
La inflación podría situarse a finales del año en un 3,5 por ciento, siete décimas superior a la última predicción de la OCDE. En lo referente a materia de empleo, el porcentaje del 11,2 por ciento se repetirá en el 2003. Es decir, que la economía española no crecerá tanto como se auguraba en el informe que la Organización publicó en abril, que los precios seguirán un ritmo alcista y el desempleo no se reducirá hasta el 2004. Para empezar a escalar hay primero que levantarse y la economía española, según los indicadores, no promete una recuperación a corto plazo que le permita ponerse en pie para poder subir. En España hay dos indicadores esenciales para conocer la situación económica, son los datos referentes a la venta de coches y al turismo. La compra de vehículos y el sector turístico sufren un descenso durante este año, especialmente el turismo que ha tenido su peor campaña veraniega en mucho tiempo. La OCDE explica como causas de la desaceleración económica en la primera mitad del año, la caída de la demanda interna, lo que ha llevado a una reducción de la actividad. Como consecuencia prevé un aumento de la inflación, es decir, subirán los precios, lo que traerá una pérdida de competitividad de nuestros productos. Este hecho se explica con el aumento de los precios, que encarecen nuestros costes de producción, y por lo tanto nuestros productos dejan de ser rentables frente a los europeos. Para evitar esta situación, la OCDE aconseja que lo mejor es reducir la inflación, acercar los salarios al crecimiento económico de la productividad y equilibrar la balanza presupuestaria. Sobre este último hecho, el informe muestra su incertidumbre sobre cómo las rebajas fiscales anunciadas por el Gobierno, que supondrán menores ingresos para éste, podrán ser equilibradas con un menor gasto público. En la otra cara de la moneda hay que reflejar que el crecimiento económico en España es un punto porcentual superior al de la media europea. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, destacó que en el 2003 el crecimiento de la economía española será superior al del resto de los países industrializados. Una afirmación que la construye a partir de los informes de la OCDE, el FMI y la Comisión Europea.