NBA
Curry y sus Warriors desinflan el partidazo de LeBron James
Por Fernando García3 min
Deportes05-06-2017
Nada parece poder parar a Golden State, que homenajeó a su entrenador Steve Kerr con una victoria en su vuelta al banquillo local. El enorme partido de James, que con un triple-doble igualó a Magic Johnson en esa estadística, fue contrarrestado por otro de Stephen Curry, que contó con la ayuda de un imparable Durant y un más acertado Klay Thompson.
El factor cancha y una gran defensa amenaza con acabar la final por la vía rápida. Golden State se encuentra en el mejor momento de la temporada y sus estrellas no fallaron para derrotar a los Cavaliers por 132-113. A pesar de que la igualdad se mantuvo hasta el tercer cuarto, un sensacional final de partido acabó con las esperanzas de los defensores del anillo.
Si el primer partido tuvo como protagonistas a Kevin Durant, en el segundo tuvo que compartirlo con Stephen Curry. El playmaker de los de blanco y oro sumó triple-doble de 32 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes, que condimentó con un sensacional 14 de 14 desde la línea de castigo y cuatro triples en momentos importantes.
En el bando contrario, el omnipresente LeBron James tampoco falló. Otro triple-doble –con el que igualó a Magic Johnson como máximo en esta estadística en playoffs – mantuvo a los Cavs en el choque, pero pese a contar con los 27 tantos de Kevin Love y a que sus números se fueron a 31 tantos, 14 pases de canasta y 11 capturas, la superioridad del quinteto titular de los de La Bahía decidió el encuentro.
Si la actuación de Curry y LeBron se contrarrestó, la aportación de Durant, Thompson y Green sometió a los visitantes. ‘KD’ destacó en ambos lados de la cancha, y sus 33 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias no hicieron palidecer su defensa, que con cinco tapones y tres robos de balón le dejaron cerca de lo que los amantes de la estadística llaman un 5x5. Klay Thompson mejoró sus números y se fue por encima de los veinte puntos, y aportó defensa en los momentos en los que Green tuvo que sentarse por acumulación de faltas.
El choque comenzó con Cleveland desatado. Kevin Love anotaba a placer y los Cavs parecían querer dar la vuelta a la eliminatoria. Pero una rápida reacción de Durant dio un vuelco al marcador y los Warriors lograban silenciar a la afición visitante. El primer tiempo fue extraño para los locales, ya que con 13 perdidas igualó la peor marca de la historia de las finales, a pesar de que en el primer partido solo tuvo cuatro.
Con 20 puntos tras perdida en la primera parte, los Cavaliers se ponían a uno al borde del descanso. A pesar de los fallos, la gran defensa de Livingston y Klay Thompson no dejaban anotar a Kyrie Irving, y los de Lue lo notaban. Steve Kerr, que regresaba al banquillo tras su operación de espalda, arriesgaba y no sentaba a Green, quien acumulaba demasiadas faltas personales. Los suplentes no cambiaron el resultado del choque, y fichajes de relumbrón como Deron Williams mostraron su peor cara.
El segundo tiempo contó otra historia. Cleveland aguantó el inicio del nuevo periodo, pero Curry hizo acto de presencia. Una jugada de malabarista frente a la defensa de LeBron iniciaba un parcial que les llevaba a sacar 14 puntos de ventaja, pero nuevamente las perdidas -20 en total – metían brevemente en el partido a los defensores del título.
El partido parecía abierto, pero apareció Durant para cerrarlo. Sus nueve puntos en el último cuarto se sumó a un parcial de 13-2 que resultó definitivo. James no encontraba el acierto en el tiro, y los locales sumaban el segundo punto de la serie. La eliminatoria se traslada a Cleveland donde los actuales campeones deberán ganar si no quieren que los Warriors celebren el campeonato antes de tiempo, e intentarán repetir la hazaña del año pasado, donde levantaron un 2-0 en contra para llevare finalmente el anillo.