FRANCIA
Las elecciones en Francia llegan sin un claro vencedor
Por Luis Artola
4 min
Internacional21-04-2017
Las próximas elecciones presidenciales en Francia se producen este próximo domingo, 23 de abril. Los candidatos más potentes llegan con resultados muy ajustados en intención de voto en el último sondeo. Emmanuel Macron, con un 24% en las encuestas, ganaría en la primera vuelta. El socialista Benoït Hamon se descuelga y la ultraconservadora Marine Le Pen llega en horas bajas a las elecciones lo que le ha llevado a radicalizar más su discurso contra la inmigración.
Las elecciones presidenciales francesas se celebran el próximo domingo. A pesar de ello, las encuestas no se atreven a dar el nombre de un claro vencedor lo que muestra el gran número de votantes indecisos. De momento se estima que solo ejercerá el derecho a voto el 66% de los franceses. Únicamente se han postulado ante la probable caída del socialista Benoït Hamon. Los candidatos apuran las últimas horas para intentar captar a los numerosos indecisos y movilizar el voto a su favor en aquéllos que tienen intención de abstenerse.
Después de una intensa campaña electoral llevada a cabo por todos los candidatos los actos electorales concluyen este viernes. Pese a ello, tras el atentado yihadista producido en París la pasada noche y, que se saldó con la muerte de un policía, algunos de los aspirantes han cancelado los mítines previstos para este viernes, como Le Pen, Fillon y Macron. De los grandes candidatos, únicamente Mélenchon mantiene su programa.
Marine Le Pen tenía previsto realizar una visita a un refugio de animales en Montceau les mines, en la Borgoña. Fillon, candidato conservador iba a reunirse con partidarios en Chamonix, mientras que Emmanuel Macron que llevaba su campaña a Rouen y Arras, ha declarado tras suspender su visita que las fuerzas policiales deben "movilizarse para asegurar la seguridad de los ciudadanos". En cuanto a otros líderes, como el de Francia Insumisa, ha preferido proseguir para demostrar a los terroristas que no tienen la última palabra.
El liberal Emmanuel Macron, quien llegó a ser ministro de Economía en el Gobierno de Hollande, es el mejor posicionado en los últimos sondeos, con un 24% de intención de voto. Su última maniobra electoral ha sido el envío de una carta a los profesores de todo el país para pedir el voto tras enorgullecerse del trabajo que realizan. En cuanto a Jean-Luc Mélenchon, actualmente eurodiputado por el Frente de Izquierda, ha pedido a sus simpatizantes que intenten convencer a sus amigos y familiares para que le otorguen el voto. Asimismo su estrategia ha sido el intento de captación de los votantes socialistas que puede haber perdido Hamon.
En las últimas encuestas ha descendido su popularidad tras un buen arranque de campaña. Este izquierdista radical cree posible que la influencia de los acontecimientos ocurridos en Venezuela como la represión ciudadana, afecte negativamente a su candidatura. De hecho el último sondeo le da siete puntos menos que en las encuestas previas. A pesar de ello ha contado durante su campaña con apoyos internacionales, incluso de Evo Morales, presidente de Bolivia. Mélenchon intenta evitar el miedo surgido tras su proposición de abordar una política de cooperación con América Latina. El candidato socialista, Hamon, ha tropezado en el último sondeo que le sitúa en el 7% en lo que se espera sea un desastre político.
El bien posicionado Macron recibió este jueves la llamada telefónica del expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, en lo que supone un apoyo no oficial a su candidatura. Asimismo cuenta con la simpatía del que fuera primer ministro durante el mandato de Jacques Chirac, Dominique de Villepin lo que posiblemente le acerque a los socialistas moderados.
Por otra parte, Marine Le Pen ha acusado un desgaste en los últimos meses tras intentar desviar la atención a la clase obrera del norte y este del país, lo que puede costarle gran cantidad de votos de sus habituales adeptos, jóvenes varones en su gran mayoría así como hasta un 60% de votantes que rechazan a otras formaciones. En sus últimos mítines ha proclamado que es prioritario "convencer a los indecisos o tomar de la mano a los abstencionistas". Por ello, la política ultraconservadora ha maniobrado un cambio de dirección en su alegato en defensa de los derechos de la mujer aunque ha radicalizado aún más su discurso contra aquéllos que llegan a Francia procedentes de otros países.
François Fillon, exprimer ministro en el Ejecutivo de Nicolás Sarkozi, y que mantiene la esperanza de una derecha dividida, ha recibido la defensa del expresidente. Otro compañero de partido y ministro de Exteriores durante la misma etapa, Alain Juppé también se ha sumado al apoyo al candidato conservador. Fillon fue imputado por falsificación y malversación de fondos y, a pesar de ello, cuenta posiblemente con voto mayoritario de los pensionistas aunque su endeble situación en los sondeos le ha llevado a intentar recabar el apoyo de asociaciones y organizaciones católicas. No obstante, confía en que pasará a la segunda vuelta, según ha declarado al semanario francés Le Journal du Dimanche.