ITALIA
Siria acapara la atención del G-7 de Exteriores
Por Luis Artola4 min
Internacional11-04-2017
Este lunes y martes ha tenido lugar en la ciudad italiana de Lucca la cumbre G-7 de Exteriores. Ambas jornadas han centrado su atención en Siria y Rusia. El conflicto sirio y el apoyo de Rusia han ocupado la mayor parte de las reuniones de los países más poderosos. A pesar de la inicial propuesta de sanción a Rusia por no evitar el ataque químico en Siria, la declaración final ha abogado por el diálogo con Moscú ante el importante papel que podría desempeñar para resolver la guerra en Siria.
Los países que conforman el G-7 se han reunido durante dos días en la ciudad italiana de Lucca. Los ministros de Asuntos Exteriores y otros altos representantes y expertos en la materia de estos países han celebrado desde este lunes la cumbre que ha concluido hoy, martes. Junto a ellos, ha participado la alta representante de la Unión Europea (UE) para asuntos exteriores, Federica Mogherini.
Durante la jornada del lunes se produjo el primer encuentro en el que analizó la situación internacional para después realizar la foto de familia. Incluso tuvieron tiempo para visitar el centro de la villa de la región de la Toscana y finalmente una cena de trabajo. La visita se realizó a la cripta en memoria de los más de 500 personas que murieron en la masacre de Santa Ana de Stazzema ejecutada por el ejército nazi en 1944. Entre los reunidos en esta cumbre se encuentran el secretario de Estado de los Estados Unidos, Rex Tillerson y sus homólogos de Alemania, Gabriel Sigmar, Francia, Jean Marc Ayrault, el italiano Angelino Alfano, el ministro del gobierno de Theresa May, Boris Johnson, el de Japón, Fumio Kishida y representando a Canadá, Chrystia Freeland.
Los temas principales a debatir, aparte de encuentros bilaterales, se centraron fundamentalmente en Siria. La crisis que vive este país ha provocado desde el 2011, tras el inicio de la guerra civil después de las protestas contra las políticas del Gobierno de Bashar Al Assad, la muerte de más de 320,000 personas y el desplazamiento de unos 12,000,000 de refugiados. Asimismo inquietan las relaciones de Rusia con la comunidad internacional y el apoyo de este país al régimen de Al Assad. Éste se ha materializado de forma más contundente desde el pasado 4 de abril tras el ataque químico ejecutado por el ejército sirio a la ciudad de Khan Sheikhoun que se saldó con decenas de muertos. La respuesta fue inmediata por parte de Estados Unidos que bombardeó con misiles ciertos puntos estratégicos de Siria.
Según declaró el ministro de Exteriores británico, Johnson, el G-7 evaluará la posibilidad de sancionar a Siria y Rusia. De hecho, en sus redes sociales, el representante británico confirmó que "el apoyo de Rusia al régimen de Al Assad centra las conversaciones de estos días". Johnson valoró la posición rusa, que según opina "tiene dos opciones: estar al lado del régimen de Al Assad o trabajar con el resto del mundo para encontrar una solución política para Siria". En el mismo sentido, el secretario de Estado de EEUU, Tillerson culpó a Rusia por no impedir el ataque químico del Gobierno sirio y pidió la necesidad de responsabilidad a aquellos que causen "daños a inocentes en cualquier parte del mundo".
Durante la mañana de este martes, la segunda y última jornada se ha llevado a cabo una nueva reunión del G-7 de carácter extraordinario en la que se han sumado los representantes de Exteriores de Turquía, Emiratos Arabes, Arabia Saudí, Jordania y Catar. No obstante, en la congregación de este martes se ha producido un cambio en relación a la posible sanción a Rusia. Los ministros reunidos en rueda de prensa han defendido la postura de diálogo con Rusia. En la declaración final de esta cumbre han abogado por la necesidad de que se "presione a Assad" para que se produzca el esperado alto el fuego en Siria.
Además, Rex Tillerson ha señalado que el régimen de la familia Assad está tocando su fin y espera su próximo abandono del poder. Angelino Alfano, ministro de Exteriores de Italia, ha declarado que "hemos trabajado por la paz" y que esta cumbre ha llevado a la aprobación de una declaración de 30 páginas. Sin embargo, lamenta que a pesar de los continuos intentos de la comunidad internacional para que finalice la guerra en Siria, la paz no termina de llegar. Alfano ha concluido con la necesidad de una "solución política" a la guerra siria.
Por otra parte, el ministro alemán, Sigmar Gabriel, ha profundizado en la necesidad de evitar el aislamiento de Rusia porque la considera fundamental en el proceso de resolución pacífica del conflicto y "puede tener un rol fundamental para presionar a Assad". Estas declaraciones descartan, pues, la proposición del representante británico de castigar a Moscú y que eran apoyadas por Francia y Estados Unidos.
Otras materias tratadas durante la cumbre han sido Corea del Norte y el provocador lanzamiento de misiles de Pyongyang, calificado por el ministro japonés, Fumio Kishida, como "una grave amenaza al orden y la seguridad para el mundo entero". Además se ha hablado sobre la crisis política de Libia y el terrorismo islámico.
Como conclusión del encuentro de los países más poderosos, el anfitrión italiano, Angelino Alfano confía en la ejecución de una posible solución en la reunión que tendrá este martes el secretario de Estado americano, Rex Tillerson, con su homólogo ruso, Sergei Lavrov. No obstante, ha dicho que "el futuro de Assad no se decide en un día". El próximo 26 de mayo tendrá lugar en Taormina, Sicilia, la anticipada cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G-7 donde se abordará especialmente el conflicto sirio.