LATINOAMÉRICA
Una avalancha en Colombia deja 254 muertos en la villa de Mocoa
Por Luis Artola
3 min
Sociedad03-04-2017
La ciudad de Mocoa, ubicada en el sur de Colombia, ha sido testigo mudo de una catástrofe natural iniciada el pasado viernes. Las excepcionales lluvias que han tenido lugar han provocado el desbordamiento de los ríos que atraviesan la ciudad con el resultado de una avalancha que ha destruido al menos 17 barrios. CRC estima hasta ahora un balance de 254 muertos y cientos de heridos. El difícil acceso a la zona merma la capacidad para poder evacuar a los cientos de afectados. Se ha decretado estado de calamidad.
Durante el pasado fin de semana la ciudad colombiana de Mocoa ha sufrido una avalancha que, hasta el momento, ha arrojado un balance de 254 muertos y se estiman al menos 220 heridos. La catástrofe ha provocado que esta ciudad del sur del país haya sido declarada en estado de calamidad. Cruz Roja Colombiana (CRC) informa a las instituciones del gobierno de forma permanente de las novedades que surgen en relación al derrumbe aunque las cifras han ido variando dada la magnitud de la catástrofe.
Durante la noche del pasado viernes comenzó a provocarse un fuerte aguacero que provocó como resultado el desbordamiento del río Mocoa así como sus afluentes, Sangoyaco y Mulatos. El desenlace de las graves consecuencias que ha producido este hundimiento hace presagiar que vaya incrementándose el número de víctimas. El estado de alarma decretado ha permitido activar e intensificar las numerosas operaciones de rescate y de ayuda a los damnificados.
Se busca con urgencia y a contrarreloj a los cientos de desaparecidos. Según palabras del director general de la CRC, César Urueña, al periódico El Mundo, "lo que más nos preocupa ahora es qué vamos a hacer con los supervivientes que han de ser evacuados. Hay niños solos, que no saben dónde están su papá ni su mamá". De todas formas, las posibilidades logísticas no prevén que puedan ser todos evacuados.
El mismo presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha visitado este domingo la zona cero en la que la pequeña ciudad de 45,000 habitantes se ha reducido a un enorme lodazal que ha arrasado el centro de la población. Tras su visita el mandatorio colombiano ha declarado que "hay mucha gente desaparecida" y posteriormente en sus redes sociales ha alentado y asegurado a los ciudadanos que "toda la capacidad del Estado está desplegada para apoyar la labor humanitaria y de búsqueda y rescate".
El presidente ha aclarado asimismo que durante el pasado fin de semana cayó al menos un 45% de la lluvia que habitualmente cae en un mes. Esta enorme cantidad no pudo contener la afluencia de los ríos circundantes a esta región, lo que finalmente "produjo la avalancha". Además las autoridades han explicado que la zona de la tragedia se encuentra ubicada en un área de aislamiento, en la llamada región amazónica que hace frontera con Ecuador y la mayor parte de los edificios de la localidad están construidos de barro y arena.
Estos factores han provocado el agravamiento de la tragedia por el alud de tierra y agua dada la dificultad para acceder a Mocoa ante las pobres carreteras que comunican la ciudad con las poblaciones cercanas. Por tanto, estas precarias condiciones acotan la posibilidad de llegar a la zona del desastre únicamente por vía aérea. El Gobierno ha facilitado una excepcional operación logística aérea con el fin de aportar alimentos, agua potable y medicinas a las miles de personas aisladas.
La villa se rodea habitualmente de una frondosa selva y ríos de enorme caudal, pero los vecinos de Mocoa se han visto sorprendido por el inusual aguacero que ha llevado a las terribles consecuencias que han dejado sin vida a cientos de sus habitantes y sin hogar a miles de sus vecinos. La última catástrofe natural, de características similares a la de este fin de semana, producida en Colombia, fue otro derrumbamiento por avalancha que afectó masivamente a la ciudad de Salgar, perteneciente a Antioquía, el 18 de mayo de 2015. El saldo final de fallecidos fue de 104 personas.