DISCURSO DEL REY

Felipe VI apuesta por la educación para afrontar los cambios tecnológicos

Por Claudia Zamora3 min

España25-12-2016

Tercer discurso de Nochebuena del rey Felipe VI. Uno de los puntos estrella del mensaje ha sido la mejora de la educación. Mientras los partidos políticos pelean por derogar la ley actual e imponer sus ideas, el Monarca aseguró que este asunto es una “clave esencial”. A su juicio, es el instrumento imprescindible para “adaptarnos a esa nueva realidad imparable y desarrollar al máximo nuestras habilidades para actuar con éxito”.

El monarca ha destaco que es “muy importante para todos que muchas familias puedan recuperar su nivel de vida y que nuestros jóvenes puedan tener oportunidades de futuro”. Felipe VI ha pedido en su mensaje de Navidad “corregir tanto las desigualdades derivadas de una crisis tan profunda como la que hemos vivido, como fortalecer nuestra cohesión social”.

El Rey ha recalcado la necesidad de una educación “que fomente la investigación, impulse la innovación, promueva la creatividad y el espíritu emprendedor como rasgos y exigencias de la sociedad del futuro”. Felipe VI ha querido alabar el papel que desempeñan los “servidores públicos” que “educan a nuestros hijos”. Además, el Rey apuesta por la educación como instrumento para afrontar los cambios tecnológicos y colocar a España como un referente en todo el mundo.

Para el sucesor del Rey Juan Carlos I, la educación debe asegurar los conocimientos, pero también debe formar en lenguas, cultura, civismo y valores. Del mismo modo, advierte que es necesario que la docencia prepare a los jóvenes para ser ciudadanos de “este nuevo mundo más libres” y más capaces, así como para que sepan aprovechar la experiencia de los mayores. Una vez más, Felipe VI ha querido mandar un mensaje de futuro a los jóvenes, a quienes pide que piensen “en la España que queremos para las próximas décadas, que será la de nuestros jóvenes”.

España está viviendo uno de sus momentos más delicados, no sólo ante la situación política tan compleja que el país vive, sino también en las discrepancias existentes en los partidos políticos ante la ley de la Lomce.  El Rey, consciente de estas situaciones, no ha querido hacer oídos sordos al problema educativo en su discurso de Nochebuena. Reformar la ley de la Lomce es uno de los grandes retos de la presente legislatura, tras décadas de enfrentamiento partidista a cuento de la educación.

El 21 de diciembre de este mismo año, el pleno del Congreso de los Diputados, finalmente, convalidó el decreto-ley que deja sin ningún efecto académico las evaluaciones finales de ESO y Bachillerato. Tanto el PP, como el PSOE y Ciudadanos, además de otros partidos como Compromís, UPN, Foro y CC, se mostraron a favor de esta medida. Mientras que Unidos Podemos se abstuvo y los nacionalistas e independentistas votaron en contra. 252 diputados votaron a favor, 18 lo hicieron en contra y 67 se abstuvieron.

“El Gobierno quiere aprovechar este momento para llegar por ver primera a un pacto”, resaltó el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo y abogó por “presentar atención a toda la comunidad educativa” y luchar por una educación equitativa e inclusiva. José Juan Díaz, diputado del PSOE, replicó que el cambio se debió cumplir hace tres años.

Por su lado, Marta Martín, diputada de Ciudadanos, defendió la convalidación para dar certeza a los alumnos y ponerse a trabajar por el pacto educativo sin prisa, pero sin pausa. Ese mismo día, la Cámara Baja aprobó la creación de la Subcomisión parlamentaria, cuya labor será buscar un Pacto de Estado Social y Político para una Ley Básica de Educación.