Discurso del rey

El Rey anima a la esperanza para la recuperación de la crisis

Por Mariló Pardo2 min

España24-12-2016

El Rey Felipe VI felicita con su habitual discurso a todos los españoles en estas fechas tan señaladas. El Rey en su despacho del Palacio de la Zarzuela se ha dirigido a España durante 12 minutos. A lo largo de su discurso ha resaltado como temas de especial importancia la recuperación de España de la crisis, la unidad del país y la educación como instrumento para impulsar el crecimiento.

Su Majestad, vestido con traje gris marengo, camisa blanca y corbata en tonos rosa, ha comenzado su discurso felicitando a las familias españolas. Después ha animado a la población a no desilusionarse si viven momentos difíciles pues estos momentos son las mejores oportunidades para descubrir nuestra fuerza interior. Ha expresado que con determinación, sacrificio y trabajo duro se consigue adelante.

El Rey ha destacado la importancia de la institución familiar en nuestra sociedad. Rodeado de numerosas fotos de sus hijas, su mujer y sus padres, ha alabado a los españoles que con su esfuerzo sereno durante estos difíciles años que ha vivido el país, han sostenido con dignidad y coraje a sus familias. Elogia, además, la solidaridad del pueblo español comentando que se entrega con su tiempo y con su corazón para ayudar a los demás y ser la mano amiga en los momentos más difíciles.

Don Felipe ha acentuado que tenemos que seguir mirando hacia adelante construyendo nuestro país, y también construyendo Europa. Ha dicho que la crisis ha impuesto grandes sacrificios pero que hoy vivimos con la esperanza de la recuperación que ya se ha iniciado. Ha destacado que todos deseamos que esa recuperación se consolide para que nos permita crear mucho más empleo y de calidad, y también corregir las desigualdades derivadas de la crisis y fortalecer la cohesión social necesaria para asegurar la estabilidad y el equilibrio de nuestra sociedad.

Acentúa la importancia de que muchas familias recuperen su nivel de vida y que los jóvenes puedan tener oportunidades de futuro, de ilusión y de confianza. También insiste en la necesidad de que cuidemos y mejoremos la convivencia entre los españoles que debe basarse en el respeto. Destaca que el respeto a los mayores, entre hombres y mujeres, en el ámbito laboral, etc. es necesario puesto que la intolerancia y la exclusión no pueden caber en la España de hoy.

Ha terminado el discurso insistiendo en que cree en una España consciente, solidaria, firme en sus valores, alejada del pesimismo, de la desilusión o el desencanto, en una España decidida a superar las dificultades que, aunque grandes, son también vencibles.