ATAQUE A IRAK
La política imperialista de Bush le cuesta el favor de importantes personalidades
Por Vicente García Gandía2 min
Internacional29-09-2002
Al Gore, Jessica Lange o el mismo Jimmy Carter son sólo algunos de los americanos que ya han emprendido una verdadera campaña de reacción a los planes y a la doctrina que el presidente estadounidense pretende llevar a cabo.
El primero de ellos reapareció en la escena política la semana pasada para criticar duramente la doctrina “imperial” de su máximo rival en la última cita electoral de EE.UU. Para el ex vicepresidente y ex candidato estadounidense “después del 11 de septiembre, disponíamos de un enorme caudal de simpatía, buena voluntad y apoyo en el resto del mundo pero lo hemos desperdiciado, y en un año lo hemos sustituido por miedo, ansiedad e incertidumbre, no por lo que los terroristas puedan hacer, sino por lo que podamos hacer nosotros”. Gore se atrevió a decir de esta manera lo que muchos otros demócratas y republicanos callan en una sociedad que ya se plantea hacia dónde lleva el belicismo imperante de la política del texano que gobierna los designios de la nación más importante del mundo. Al Gore acusó en su discurso a Bush de “recortar las libertades, de avasallar al resto del mundo, de apostar por el imperialismo y de lanzarse de forma precipitada y peligrosa a la guerra contra Irak”. El ex vicepresidente tiene claro que el apoyo republicano ante un posible ataque a Irak nace de la frustración por no haber conseguido encontrar a Osama Bin Laden y al mulá Mohamed Omar. En este sentido, aseguró además que la política del actual presidente lleva implícita una “cadena de guerras contra una sucesión de Estados soberanos: Siria, Libia, Corea del Norte, Irán...”. Por su parte, la última americana galardonada con el Premio Donostia del Festival de Cine de San Sebastián, Jessica Lange, habló también sin tapujos de su “odio” a Bush: “Lo que George Bush pretende hacer con Irak es inconstitucional, inmoral e ilegal. Odio a Bush, le desprecio a él y a toda su Administración. No sólo por su política internacional, sino también por la nacional. Venir hoy de Estados Unidos sólo me da vergüenza, es humillante”. Ante una tribuna de periodistas atónitos, la veterana actriz aseguró que “Bush robó las elecciones y desde entonces lo padecemos todos. Lo de Irak es una absoluta locura, pero lo que no entiendo es que nadie le frene, ni dentro ni fuera de EE.UU.. No veo movimientos de derechos civiles o de estudiantes que se enfrenten a un Gobierno inaceptable. No existe conciencia entre los jóvenes de lo que está ocurriendo en nuestro país y sólo espero que algún día esto cambie y alguien se levante de una vez". La política de Bush no deja pues indiferente a nadie. Otra de las voces que se alzó la semana pasada contra el Gobierno estadounidense fue el ex presidente Jimmy Carter, quien durante una conferencia en la Universidad de Virginia lamentó el unilateralismo estadounidense y declaró que supone “una ruptura radical con las tradiciones que han configurado la política de nuestra nación, bajo presidentes demócratas y republicanos, durante más de 50 años”.