INVESTIDURA

Pedro Sánchez protagoniza el primer fracaso de una investidura en España

Por Selene Pisabarro3 min

España05-03-2016

España continúa sin Gobierno tras dos debates de investidura en los que el candidato Pedro Sánchez no ha obtenido los apoyos suficientes. Ya en la primera ronda de este miércoles reconoció durante su discurso que era consciente de que no conseguiría la mayoría requerida. 48 horas después ha fracasado su intento por formar un Ejecutivo alineado a Ciudadanos durante la tarde del viernes.

Se abre ahora un nuevo plazo en el que el rey no convocará una nueva ronda de consultas al menos que exista un acuerdo sólido entre partidos para formar Gobierno. Dos meses en los que los candidatos dispondrán de tiempo para elaborar un nuevo pacto de Gobierno, antes de que el 1 de mayo se convoquen nuevas elecciones el 26 de junio.

Ni el voto a favor de la diputada de Coalición Canaria salvó a Pedro Sánchez de la investidura fallida. De nuevo, obtuvo 219 votos en contra en la segunda votación de su candidatura para formar Ejecutivo mientras que el “sí” corrió a cargo de los 130 diputados de Ciudadanos y el PSOE. Esta vez necesitaba mayoría simple, es decir: más votos a favor que en contra, mientras que en el primer intento necesitaba la mayoría absoluta del Congreso.

El candidato socialista lanzó desafió al líder de Podemos, Pablo Iglesias, al asegurar que estaba traicionando a sus votantes. Sánchez advirtió este viernes de que seguirá trabajando desde este sábado para alcanzar más apoyos durante estos meses.

Primera sesión de investidura

Sánchez obtuvo 219 votos en contra durante la primera sesión, mientras que Coalición Canaria se abstuvo y 130 se posicionaron a favor. El resto de los partidos ya habían advertido a Sánchez desde el primer momento de que no darían su brazo a torcer.

Pedro Sánchez sacó pecho de su acuerdo con Ciudadanos durante su primer discurso de investidura el miércoles. Aseguró que era la forma para apartar del poder al PP y si Podemos no apoya a los socialistas estará facilitando su continuidad. Por eso, el objetivo de Sánchez consistía en formar un Ejecutivo posibilista de “mestizaje” ideológico.

Incluso ha ofrecido un acercamiento a Podemos –que continúa vigente-, a pesar de los dardos que el líder, Pablo Iglesias, le lanzó durante su turno de palabra. Sin embargo, un hipotético acuerdo con la formación morada, provocaría la ruptura con Ciudadanos porque se consideran partidos en las antípodas ideológicas. “Esto lo podemos poner en marcha la semana que viene”, aseguró Sánchez refiriéndose a Iglesias. Un mensaje de 101 minutos en el que se dirigió en gran parte a Podemos y reivindicó el pacto con Ciudadanos.

Además, intentó apelar a la conciencia de los diputados al recordar que “los ciudadanos lo último que desean oír son reproches cruzados de nuestras siglas, ideas y programas”. Insistió en que “los españoles nos han delegado aquí para evitar una campaña electoral. Salir de esta sesión sin acuerdo significará que hemos hecho mal nuestro trabajo, no habremos sido capaces de ser la solución”.

El plan de Gobierno socialista

Pedro Sánchez recordó en grandes trazos su plan de Gobierno en su primera intervención el martes como negociar con Bruselas un nuevo calendario para regular el déficit público y modificar el artículo 135 de la Constitución para establecer el gasto presupuestario. También anunció que si la Cámara Baja aprobaba su candidatura, la suya sería la “legislatura de la igualdad”, porque regularía el equilibrio social.

Del mismo modo aseguró que su intención era crear un nuevo modo de designar a los cargos de elección parlamentaria, como son los miembros del Consejo General de Poder Judicial, la Comisión Nacional del Mercado de Valores o el Consejo de Seguridad Nuclear. También anunció que limitaría a ocho años la presidencia del Gobierno, que disminuiría el número de vocales del Consejo General del Poder Judicial y que reduciría a 250.000 las firmas necesarias para presentar las iniciativas legislativas populares.

Sin embargo, durante su intervención del miércoles se saltó un párrafo del acuerdo que firmó con Ciudadanos y que ha despertado resquemores entre las filas socialistas. No mencionó –a pesar de que estaba en el documento que proporcionó a los medios de comunicación- la creación de los Consejos provinciales de alcaldes que sustituirán a las Diputaciones provinciales.