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TERRORISMO

El Gobierno aclara que el objetivo del ataque no era la Embajada

Por Selene PisabarroTiempo de lectura2 min
España12-12-2015

De nuevo saltan las alarmas en Afganistán aunque esta vez sin apenas datos. El Gobierno carece de información sobre el ataque talibán que sufrió la embajada española en Kabul y baraja todas las hipótesis para aclarar qué sucedió pero matiza, tras dar versiones confusas, que el objetivo del ataque no era la embajada aunque el atentado ha sido "contra España" porque ha dañado sus "intereses". Mientras, España sigue amenazada por el yihadismo al mismo tiempo que la policía y la Guardia Civil continúan con las detenciones a presuntos yihadistas.

La reacción del Ejecutivo ha creado confusión desde que se produjo el atentado en Kabul este viernes. En un primer momento, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró que no se trataba de un ataque contra la embajada sino contra una casa de huéspedes cercana en la que había ciudadanos estadounidenses. También el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha insistido en que la explosión del coche bomba no estaba dirigida contra el complejo que integran los tres edificios de la embajada española.

Sin embargo, el Ministerio de la Presidencia ha emitido un comunicado este sábado en el que rectifica y asegura que sí es “un ataque contra España” porque “han fallecido dos ciudadanos españoles” y “nuestros intereses han sufrido graves daños”. Sin embargo, aclara que el objetivo del ataque no era la embajada, algo que ya habían resuelto tanto la policía afgana como los talibanes en un comunicado.

De momento, el Ejecutivo mantiene abiertas todas las líneas de investigación y no descarta  ninguna hipótesis. España actualmente está amenazada por los grupos yihadistas, como Al Qaeda, aunque especialmente por el Dáesh (o el mal llamado Estado Islámico) que a través de su revista electrónica, Dabiq, advierte a España de que es uno de los objetivos terroristas.

Mientras, la policía estrecha el cerco a los yihadistas. Desde los atentados yihadistas en París el pasado 13 de noviembre, la Guardia Civil y la Policía Nacional han detenido a 10 personas –de las cuales, tres son mujeres- en apenas un mes. El último sospechoso, un español de 34 años, fue arrestado en Ceuta durante la madrugada de este sábado. Está acusado de captar a jóvenes por internet para reclutar en las filas del autodenominado Estado Islámico.

De esta forma, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han detenido a 74 personas en lo que va de año y a 27 en el extranjero; una cifra que dobla a la del año pasado, cuando fueron 36. España se encuentra a la cabeza de las operaciones de lucha antiyihadista y lidera, junto con Francia el número de detenciones. Exactamente, 175 desde que empezó la legislatura en noviembre del 2011.

Según un informe que publicó en noviembre el Real Instituto Elcano, Barcelona continúa siendo el principal escenario yihadista, donde reside alrededor del 30% de los arrestados desde el 2013. Además, la tendencia ha cambiado, ya que el 40% ha nacido en España, mientras que casi el 95% estaba inmerso en redes de reclutamiento yihadista y el 90% en redes de radicalización. Todos estaban relacionados con el Daesh.

El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) ha detectado que se enviaron 117.000 euros entre enero de 2014 y mayo de 2015. Las transferencias se realizaron desde Siria, Irak, Turquía y Líbano a Ceuta y Melilla. La organización es intergubernamental y está compuesta por 36 países, entre ellos España, por lo que cuenta con datos que les proporcionan los mismos Gobiernos. GAFI estima que las 249 operaciones bancarias  sirvieron para costear los viajes hasta los países en conflicto como Irak y Siria.