ATAQUE A IRAK

Aznar promete apoyo incondicional a Bush

Por Ángela González Rodríguez2 min

Internacional15-09-2002

Ante la pregunta en el pleno del Congreso realizada por el secretario general del PSOE, José Luis Zapatero, quien defiende la unidad de la coalición internacional, Aznar respondió defendió tajantemente su apoyo a Estados Unidos ya que, en su opinión, el primer objetivo debe ser evitar que se repitan atentados como los perpetrados en Nueva York y Washington el pasado 11 de septiembre de 2001.

El presidente subrayó que España estará siempre con quienes luchan contra el terrorismo y, en este sentido, instó a que quienes crean lo contrario se pregunten si están dispuestos a esperar que se produzcan nuevos atentados de este calibre. Añadió además que el régimen iraquí hace tiempo que intenta por todos los medios proveerse de armas de destrucción masiva, y que, dando cobertura al terrorismo, ha vulnerado “sistemáticamente” hasta 16 de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. En una conversación telefónica mantenida entre los jefes de Gobierno de Estados Unidos y España, George Bush y José María Aznar, éste último expuso a su homólogo la intención española de lograr una posición común en el seno de la ONU que apoye las medidas necesarias frente a Irak. Del mismo modo, Aznar confirmó al presidente estadounidense que, si Sadam Hussein vuelve a incumplir las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, España apoyará a EEUU en la lucha contra el terrorismo, aunque no se alcanzase un acuerdo en el seno del Consejo de Seguridad. El jefe del Ejecutivo español considera que la cuestión de Irak está relacionada directamente con la lucha contra el terrorismo internacional; sin embargo, el dirigente español ha señalado al presidente estadounidense que los españoles “están en un lado”, perciben el problema, están convencidos de la situación y no olvidan que EEUU colabora solidariamente con España en la lucha contra el terrorismo. No obstante, no todos los españoles apoyan el criterio de Aznar. Este es el caso de la Campaña Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Irak, compuesta por representantes de Izquierda Unida y del Comité de Solidaridad con la Causa Árabe (CSCA), que enviará una delegación a Bagdad el domingo 15 para participar en una reunión de coordinación internacional ante la previsión de una intervención militar de Estados Unidos contra este país. Desde mayo de 1999, organizaciones y personalidades procedentes de todo el mundo se reúnen semestralmente en la capital iraquí con el objetivo de “intercambiar información y coordinar iniciativas contra el embargo y el asedio militar a Irak y expresar su solidaridad con el pueblo iraquí”. Junto a los miembros de esta campaña, se encuentra el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, quien respondió a la posición expresada por Aznar que, ante los graves problemas que atraviesa el mundo, hay que respetar y reforzar instituciones como las Naciones Unidas para buscar soluciones a través del diálogo. Así mismo, Zapatero insistió en que el PSOE “no está ni con Bush ni, por supuesto, con Sadam, porque está con lo que decida la ONU y con Koffi Annan”, ya que no es partidario de una acción armada unilateral sino que apuesta por la vía del diálogo, respetando toda resolución que acepte el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.