Refugiados
Bruselas reforzará los controles de acogida
Por David Pastor2 min
Internacional26-10-2015
En la cumbre extraordinaria de la Unión Europea, establecida a petición de Angela Merkel para tratar el movimiento de los refugiados, los Estados presentes establecieron tres líneas fundamentales de actuación: 1) Habilitar cobijo y condiciones humanas para acoger a 100.000 personas. 2) Controlar los flujos migratorios a través de un registro de inmigrantes. 3) Aumentar la seguridad y los controles en las fronteras exteriores, especialmente en la frontera de Eslovenia.
Esta nación ha recibido en los últimos días alrededor de 60.000 refugiados. Su primer ministro, Miro Cerar, se mostró satisfecho por los compromisos establecidos en la cumbre y expresó su deseo de que otros países como Croacia, con quien han tenido conflictos fronterizos por este asunto, se atengan al acuerdo establecido. El cierre de las fronteras croatas o húngaras, ha desviado fuertemente el flujo migratorio hacia la región eslovena. Además de la llamada ruta de los Balcanes, también Grecia se ha comprometido a habilitar su infraestructura para acoger a 30.000 personas antes de que termine el año.
Las autoridades europeas solicitarán a los países implicados que no permitan el tránsito de exiliados hacia otros países sin consentimiento previo de éstos. En este sentido, se ha pedido la colaboración para intercambiar información entre las fuerzas del orden de diferentes países, que evite la adopción de medidas de forma unilateral.
El tránsito contará también con la participación de ACNUR. El alto comisionado de la ONU, Antonio Guterres, expresó su preocupación en una rueda de prensa posterior a la cumbre, en la que hizo un llamamiento a la solidaridad de todos los países de la Unión Europea. Reclamó un incremento de las plazas de acogida y enunció la puesta en marcha de lugares de descanso para refugiados, ubicados en la ruta que siguen desde Grecia hasta el norte de Europa.
La agencia europea de vigilancia de fronteras calcula en más de 700.000 el número de inmigrantes y refugiados que han atravesado las fronteras de la UE desde comienzos de año. La mayoría de ellos escapan de la situación bélica que viven en Siria, Afganistán e Irak. Más de 3.000 personas han muerto tratando de llegar a Europa, una cifra que puede ser todavía más dramática con la llegada del invierno.
Y es que el creciente frío que asoma el continente europeo y las peores condiciones marítimas, no están disminuyendo la afluencia de personas que escapan de los horrores de la guerra. En este sentido, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, calificó de inaceptable el hecho de que los refugiados tengan que dormir al aire libre, bajo el frío de la noche, en la Europa del 2015. Al mismo tiempo, también ha defendido el control de flujos como la única manera de garantizar el orden y ralentizar la llegada descontrolada de personas.