CONFLICTO EN SIRIA
El pueblo sirio: entre el régimen de Al Asad y el horror del yihadismo
Por Jesús Espinosa2 min
Internacional01-10-2015
El presidente sirio, Basah Al Asad, lejos de poner fin a la guerra civil que vive el país es tachado de asesino desde muchos organismos internacionales por el conflicto que vivió su país en 2011, cuando el Gobierno replegó tanques y asesinó a más de 25 civiles, según denunció la oposición. Durante este tiempo, además de la guerra interna, los ciudadanos también viven los horrores del yihadismo.
Bashar Al Asad se ha convertido en la cabeza de un férreo sistema político en Siria que ya construyó su padre, que murió. Su hijo heredó el cargo el 10 de junio del año 2000 para mantenerse en el poder. Su figura está muy polarizada dentro de la población siria: algunos lo odian y otros lo idolatran. Todo depende de si la persona simpatiza o no con el régimen.
En el año 2011, el presidente sirio adelantó que habría elecciones parlamentarias y nuevas Constitución antes de 2014. Precisamente durante ese año, éste llegó a sacar incluso tanques del ejército para aplastar las protestas que, contra él, se curtían en las calles sitias. Dichas intervenciones militares llegaron a causar más de 25 muertos, según informaban los miembros de la oposición.
Las protestas contra Al Asad se comenzaron a mediados de marzo de 2011, pero fue en abril cuando el presidente decidió utilizar la fuerza militar contra su propio pueblo. Ese repliegue ofensivo comenzó rodeando las regiones de Duma y Deraa, considerados los principales focos de resistencia contra el régimen de Al Asad. Después de esos incidentes, en un discurso televisado, el presidente anunció que aunque “algunos quisieron una revolución” son el verdadero pueblo sirios los que han conseguido “una victoria”. “Os felicito por ello”, decía.
Todavía a día de hoy continúa en Siria un conflicto bélico entre las Fuerzas Armadas de Siria, que pertenecen al Gobierno de Al Asad, contra las fuerzas rebeldes de la oposición. Los principales grupos armados son el Ejército Libre Sirio y el Frente Islámico.
Siria venía de pasar una guerra, que todavía continua, pero que había provocado la muerte de aproximadamente 170.000 personas y que había obligado a centenares de miles más a huir del país o desplazarse a otros lugares. Es parecida a la crisis de refugiados que está viviendo Europa en el año 2015. Son más de 200.000 muertos los que ahora sufre el país sirio porque la guerra.
Por último, y a todo esto, la población siria también está sufriendo las consecuencias del yihadismo. Grupos como el Estado Islámico o las diferentes ramas que posee Al Qaeda en Siria están causando miles de muertes y está proclamando numerosos califatos que se podrían definir como Estados fallidos donde prima la represión y el miedo.
Un informe de Naciones Unidas concluyó en el año 2012 que el conflicto que vive Siria es una lucha entre una mayoría que controla el Estados y las milicias contra grupos rebeldes. A esto hay que sumar que, actualmente, el Gobierno sirio de Al Asad cuenta con el apoyo de Rusia, puesto que los dos países son aliados desde tiempos de la Unión Soviética.