CATALUÑA
La CUP reitera que no apoyará la investidura de Mas
Por Selene Pisabarro3 min
España28-09-2015
Para Artur Mas estas elecciones han resultado ser un apoyo a la democracia lo que le da un impulso a continuar el camino hacia la independencia. Sin embargo, los dos partidos independentistas que concurrían a los comicios han conseguido el 47% de apoyos, mientras que alrededor de un 52% ha elegido continuar en una Cataluña anexa a España. Junts pel sí necesitará el apoyo de la CUP para gobernar, pero ésta ha insistido que no apoyará la investidura de Mas porque el 27S ha demostrado que "nadie es imprescindible"
Artur Mas no ha conseguido un buen resultado y se ha quedado bajo mínimos después de que las encuestas previas le otorgaran casi una mayoría absoluta para gobernar. En cambio, ahora dependerá de los diez escaños de la CUP, si quiere apoyarles para emprender un camino que durará 18 meses hasta conseguir el proceso soberanista.
Mas sale debilitado de estas elecciones e incluso puede llegar a no ser elegido de nuevo president de la Generalitat. Si hasta ahora, el partido de Mas, CDC, gobernaba con Unió con un total de 71 escaños, lo cierto es que Junts pel sí, la coalición de partidos independentistas, apenas ha obtenido 62 escaños, lo que les obliga a buscar un socio de Gobierno o que apoye la investidura del futuro presidente catalán. Sin embargo, CUP se ha mostrado reticente a votar por la investidura de Mas y el candidato de la CUP, Antonio Baños, ya avisó: “Mas no es imprescindible”. Baños, ha dicho que su lista quiere "un Govern de concentración y una figura de consenso que lo presida".
Aun así, el Govern instará a las instituciones europeas e internacionales a que dialoguen y les acompañen hacia esta vía. Precisamente, ya lo advirtió hace un mes, cuando declaró que, aunque no consiguiera el 50% de los votos, proclamaría la independencia de igual forma. Ahora toca elaborar un proyecto constitucional que supla a la Constitución española en menos de diez meses para después convocar el referéndum. En este texto aparecerían enmarcadas las estructuras que necesitaría un nuevo Estado catalán.
Sin embargo, antes de que Artur Mas se convirtiera en el president de la Generalitat que pretende proclamar la independencia, lo cierto es que en el 2002 declaraba que “la independencia es un concepto anticuado y oxidado. Apuesto por la España plurinacional”. Así lo recogía el ensayo Qué piensa Artur Mas, cuando aún no se había aprobado el nuevo estatuto de autonomía en 2006. Incluso en el 2009 aseguró que no quería un referéndum porque supondría elegir entre pertenecer o no a España y ser, por tanto, españoles.
Pero no ha sido hasta el 2012 cuando Mas ha comenzado a sortear los límites de la ley para avanzar en el proceso soberanista. Consiguió ser presidente de Cataluña en su tercera candidatura de la ya extinta alianza Convergència i Unió (CiU) en 2010. Precisamente, sus ansias de independentismo se consagraron el 9 de noviembre del 2014, cuando convocó una consulta sobre la soberanía de Cataluña, pero que el Ejecutivo nacional recurrió ante el Tribunal Constitucional, que declaró su nulidad. El sí gano frente al no con un 80% de los votos, pero lo cierto es que apenas acudió el 35% del electorado a las urnas. El último sondeo del CIS reveló que el 41% de los catalanes se declara nacionalista y tan sólo el 21,6% se siente “sólo catalán”. Además, su partido, Convergència, no pasa por su mejor momento ya que está implicado en las supuestas comisiones ilegales con las que cobró un 3% de varias empresas privadas, después de que la Guardia Civil registrara sus sedes a finales de agosto.