REFUGIADOS
La solidaridad europea, a prueba con la crisis migratoria
Por Jesús Espinosa2 min
Sociedad18-09-2015
El drama de los refugiados ha puesto a prueba la solidaridad europea. La Unión Europea ha encontrado un sistema de reparto por cuotas que, aunque no es apoyado por unanimidad por parte de todos los Estados miembros, es lo más cerca que han estado la institución comunitaria de encontrar una solución. España debería acoger a 14.931 personas refugiadas según dicho reparto.
Alemania liderada por su canciller Angela Merkel, ha sido el país que más ha presionado para que se inicie un proceso de acogida de refugiados por cuotas. Dentro de la Unión hay países reacios a dicha propuesta pese a ser los que menos tendrían que acoger. Alemania por el momento es el país de la UE que más solidaridad está mostrando. No solo por sus iniciativas sino también por la acogida que está dispuesta a hacer.
La cantidad de refugiados que debería acoger cada país se calcula en función de cuatro criterios: la población, el Producto Interior Bruto (PIB), el nivel de desempleo y el esfuerzo previo de acogida de cada país. En este último, países como Italia, Grecia o España ya han acogido a muchos inmigrantes que llevan a sus costas. En el caso español, la famosa valla de Melilla recibe a la semana miles de personas.
Dentro de ese reparto, el país que más refugiados tendrá que acoger es Alemania, con un total de 31.443. El segundo país es Francia, puesto que el Ejecutivo de Hollande recibirá a unas 24.000 personas refugiadas en esta primera tanda de cuotas. En tercer lugar se encuentra España, con 14.931. En ese sentido, los países más beneficiados por este reparto de cuotas son Estonia, Chipre y Malta. Éstos solo tendrán que acoger a 373, 274 y 133 personas respectivamente.
En el caso de España, hay que sumarle que en mayo acogió a 2.749 personas. El Gobierno español, en palabras de su vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha dicho que se está trabajando “intensamente” para que los refugiados que llegan tengan garantizada, además de la acogida, los servicios básicos que merecen.
Todavía no se sabe cuánto llegarán estas personas a cada país, puesto que todavía no se ha aprobado este reparto de forma unánime dentro de la UE. Países como Hungría la rechazan. Lo cierto es que España ha ofrecido “máxima colaboración” y “experiencia” en la materia para “agilizar el proceso”.
Cuando se hizo público el listado de reparto de refugiados, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aseguró que se debe “acoger a los refugiados en la UE” porque eso significaría tener “más Europea y más unión”.
Los líderes comunitarios están haciendo un sobreesfuerzo para convencer a los Gobiernos que se oponen al reparto. Juncker recordó asimismo a los españoles que huyeron de la Guerra Civil, a los revolucionarios húngaros o a los checos cuando se produjo la Primavera de Praga. Puso de manifiesto que en el ADN de la Unión Europea se encuentra la acogida de los refugiados para garantizarle los derechos básicas de vida a aquellos que huyen de una guerra en su país.