Copa América

Chile es rey de América

Por Jaime Palacios3 min

Deportes05-07-2015

Chile se proclamó campeona de ‘su’ Copa América tras vencer a Argentina en los penaltis. En un partido trepidante, falto de goles pero repleto de emociones, el fútbol chileno levantó la primera Copa América de su historia. Alexis Sánchez marcó el penal decisivo, que daba el trofeo a ‘La Roja’. La Argentina de Messi vuelve a quedarse a las puertas de la gloria. El astro argentino tendrá que esperar para emular a Maradona y dar a su país un gran título.

El planteamiento de ambos equipos ya auguraba una noche de pocos goles. Martino se guarecía metiendo a Biglia junto con Mascherano. Hoy no era día para Banega. Atrás un aguerrido Demichelis sustituía a Garay, para mantener controladas las acometidas de Alexis, Vargas y Valdivia. La idea de Chile era clara: llegar a la portería de Romero en tres toques, buscando siempre la espalda de los laterales. Durante los primeros minutos Chile encontró petróleo por la banda de Marcos Rojo, muy desconcentrado en labores defensivas durante todo el partido. Fueron por esa banda derecha por donde llegaron las primeras ocasiones chilenas. Pudo hacer el primero Valdivia, pero eligió conectar con Vidal en lugar de fusilar a Romero. Argentina no conseguía zafarse de la presión chilena, con Mascherano fuera del partido, sin entrar en contacto con el balón. Durante esos momentos de dominio chileno. Llegó la primera clara del encuentro. Una volea de Vidal que obligó a Romero a estirarse para evitar el primero del encuentro. Argentina tardó 20 minutos en despertar, lo que tardó Messi en colocar un magnífico centro a la cabeza de Agüero. Bravo desvió el esférico de milagro. La ocasión hizo recular a Chile, apostando sus opciones ofensivas a balones a la espalda de los centrales buscando la carrera de Vargas y Alexis. Mientras, Argentina seguía a lo suyo, acaparando la posesión y buscando a un Leo Messi marcado muy de cerca por Gary Medel. El astro argentino no gozó de excesivo protagonismo durante la primera mitad, sin espacios para recibir, siempre incordiado por dos o tres futbolistas chilenos cada vez que recibía el balón. Poco antes del descanso, Di María se rompía tras una carrera de 30 metros.

Chile comenzó mejor la segunda parte, con los pulmones otra vez cargados tras el paso por vestuarios. El físico y la garra han sido las armas que han permitido a Chile alcanzar la final de la Copa América. Esas dos cosas y la clase de Valdivia. El mediapunta es el faro que ilumina el juego chileno. Cuando él tiene la bola, Chile juega con sentido. Comandados por el talentoso chileno, ‘La Roja’ fue llenándose de confianza según pasaban los minutos, según iban viendo que la todopoderosa Argentina no conseguía general peligro sobre los palos de Bravo. Los locales encontraron en la banda de Marcos Rojo una auténtica autopista ante la inoperancia del lateral del Manchester, lo que unido a la falta de ayudas defensivas de Lavezzi, convirtió la banda izquierda argentina  en un auténtico coladero. En una de esas incursiones Alexis se quedó solo ante Romero, pero cruzó en exceso el esférico. No obstante, la última la tuvo Argentina. Higuaín pudo evitar la prórroga, pero no consiguió acertar a finalizar un buen pase de Lavezzi. Otra vez el argentino volvía a fallar en una cita importante.

Tras no haber podido mover el marcador en los 90 minutos, la prórroga desenmascaró el gran error de Martino: haber realizado los tres cambios antes del minuto 75. Con Lavezzi cojeando, Mascherano renqueante y Messi desaparecido, Argentina ya no creaba juego. Precisamente, tras un fallo del centrocampista del Barça, Alexis pudo marcar el gol definitivo, pero disparó por encima de los tres palos. Los penaltis fueron inevitables y allí se irguió Bravo para detener un penal a Banega. Higuaín mandó otro al limbo y sentencio Alexis, el chico maravilla, para darle al fútbol chileno el primer gran título de su historia.