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Leonardo Padura, Premio Princesa de Asturias de las Letras 2015

Por Irene Benito Bonilla3 min

Cultura10-06-2015

El pasado miércoles 10 de junio, Leonardo Padura, escritor y periodista cubano, recibió el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2015. Considerado como el escritor cubano de mayor proyección internacional, que también cuenta con la nacionalidad española desde 2011, se impuso en las votaciones finales del jurado al novelista japonés Haruki Murakami y al poeta sirio Adonis. Veintisiete eran las candidaturas que optaban a este galardón, procedentes de dieciocho países.

Leonardo Padura Fuentes nació en La Habana en 1955, cuando a Batista le quedaban tres años en el poder. Su infancia, por tanto, fue en el mundo nuevo de la Revolución. Él mismo ha recordado varias veces esa época como un momento casi feliz, con niños que no tenían mucho pero que necesitaban aún menos, que jugaban en la calle, que tenían bastante libertad y a los que, de alguna manera, les llegaba algo de ese clima de optimismo que debía de sentirse en Cuba en los primeros 60.

Fue a la universidad en los 70, se hizo periodista, embarcó hacia la guerra de Angola, aunque no fuera para combatir sino para hacer algún trabajo administrativo, sobrevivió al Periodo Especial y, justo en ese momento de hambre, decidió escribir. Mandó el manuscrito de Máscaras al premio Café de Gijón y lo siguiente fue una llamada de Beatriz de Moura para decirle que preparara el pasaporte, que había ganado.

Además de escritor, el autor ha trabajado como guionista, periodista y crítico, logrando el reconocimiento internacional con las novelas policiacas del detective protagonista Mario Conde. La serie consta de varios libros, Pasado perfecto, Vientos de cuaresma, Máscaras, Paisaje de Otoño, Adiós, Hemingway, La neblina del ayer y La cola de la serpiente. Asimismo, fue traducida a numerosos idiomas, obteniendo premios como el Café Gijón 1995, el Hammett 1997, 1998 y 2005, el Premio de las Islas 2000 y el Brigada 21.

Llega también a dar los últimos retoques a los guiones de un largometraje y una serie de televisión inspirada en este famoso personaje de sus novelas, Mario Conde, un descreído y escéptico inspector de policía con el que destapa la realidad de su país y retrata la decepción de una generación que lo dio todo por la revolución.

Su última obra, Herejes (2013), tiene también como protagonista al detective Mario Conde y narra la peripecia de un lienzo de Rembrandt que una familia judía intentó sacar de Alemania al inicio de la Segunda Guerra Mundial.

Además, de estas obras policiales Padura tiene otros libros, aquellos que llamamos más serios como La historia de mi vida, casi autobiográfica, El hombre que amaba a los perros, sobre el asesino de Trotski; los relatos de Aquello estaba deseando ocurrir, que cuentan los años de Angola y el Periodo Especial.

Con la concesión de este premio, que está dotado con la reproducción de una escultura diseñada por Joan Miró, Padura se ha convertido en el segundo cubano galardonado a título individual en sus 36 años de historia por la Fundación Princesa de Asturias, que en 1993 otorgó el de los deportes al atleta Javier Sotomayor mientras que en 2000 la Academia Cubana de la Lenguas obtuvo, junto al resto de academias hispánicas, el de la Concordia.

Además de Padura, Murakami y Adonis, al galardón optaban también autores como el estadounidense Richard Ford, el inglés Ian McEwan, el rumano Norman Manea y los dramaturgos David Mamet, Juan Mayorga o Tom Stoppard.