BIN LADEN
La CIA desclasifica los documentos de Bin Laden que interceptó en 2011
Obama charla con un responsable de las Fuerzas de Seguridad (©foto: Casa Blanca)
Por Selene Pisabarro2 min
Internacional21-05-2015
La agencia de inteligencia norteamericana (CIA) ha desclasificado esta semana varios documentos secretos del ex fundador de Al Qaeda, Osama Bin Laden, cuando se cumplen cuatro años de su asesinato. Precisamente, el material se obtuvo durante la operación de la unidad de marines norteamericanos, los Navy Seals, en Abbotabad (Pakistán). Fue la última ciudad en la que residió el hasta el 2011 el que fue el terrorista más buscado del mundo.
Más de cien documentos salen a la luz ahora que Al Qaeda vive sus horas más bajas pero también en el momento en el que se pone en entredicho la versión de la Casa Blanca sobre el asalto a la casa del líder de Al Qaeda. El pequeño arsenal se complementa con algunas cartas a su familia y socios, además de una lista de sus lecturas -libros como los de Noam Chomsky o manuales de videojuegos-. Incluso figuran notas sobre la economía alemana y la fuerza política de Francia.
Aunque también se hallan un informe de la Administración de George W. Bush sobre el 11S, un manual de guerra de la Academia de Oxford y un ejemplar sobre la cristiandad y el islam en España. También sobre las teorías conspirativas del 11S y sobre la Orden de los Iluminados. Según estiman los analistas, con esta larga lista de libros tenía el objetivo de conocer a fondo las estrategias de política exterior y militares de EE.UU.
Los documentos están traducidos al inglés y al alcance de un click, ya que la autoridad de vigilancia de los servicios secretos (ODNI, por sus siglas en inglés) ha permitido que cualquier persona disponga de ellos. Se trata de un paso más allá que da la inteligencia estadounidense para conocer la forma de pensar del autor de grandes masacres en nombre de Alá.
A pesar de que Bin Laden permanecía recluido en Pakistán, vigilaba de cerca los EE.UU. Su objetivo era atacar ese territorio, incluso con la ayuda de otras facciones de Al Qaeda en Yemen (AQIY, por sus siglas en inglés) y de pequeños grupos insurgentes. El fin era conseguir que la Casa Blanca retirara sus tropas de Afganistán e Irak.
Pero más allá de su instrucción, el pakistaní estaba obsesionado con su seguridad. Los analistas destacan que, tras realizar un estudio de los documentos, llegan al punto de que prefería ver un cielo cargado de nubes para escapar de los drones, su miedo era ser cazado por uno de esos aviones no tripulados.
Algo muy curioso que figura entre los papeles es un manojo de solicitudes con espacios en blanco para rellenar por futuros terroristas. Preguntas sobre pasatiempos y educación o datos personales, incluso pidiendo un número de teléfono en el caso de que el “solicitante” sea un mártir. Pero también cuestiones acerca de la cultura del islam –por ejemplo: “¿cuántos salmos del Corán ha memorizado?”- y de los objetivos que el candidato a entrar en Al Qaeda le gustaría alcanzar con la yihad. Un arsenal de documentos que, sin duda, no deja a nadie sorprendido por su variedad.