Suiza
Emilio Botín y Fernando Alonso, incluidos en la "lista Falciani"
Por David Sánchez Torrico
2 min
Economía09-02-2015
El diario digital El Confidencial ha hecho pública este lunes la "lista Falciani", en la que aparecen numerosos clientes del banco suizo HSBC. Dicha lista fue elaborada con la información del banco que el informático Hervé Falciani grabó en un CD y entregó a la Hacienda francesa en 2009 y, según El Confidencial, "ve por fin la luz como fruto de una investigación internacional coordinada por Le Monde y el ICIJ (Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación)".
Entre los presentes en la lista, a los que se asesoraba sobre cómo evitar a las autoridades fiscales en cada país, destacan el fallecido presidente del Santander Emilio Botín, el futbolista Diego Forlán, el rey de Marruecos Mohammed VI, o el piloto español de Fórmula 1 Fernando Alonso. Michael Schumacher, Valentino Rossi, el rey Abdalá II, la modelo Elle MacPherson, Heikki Kovalainen, David Bowie ,Tina Turner y Flavio Briatore son otros de los nombres publicados. Estos documentos, que abarcan el periodo entre 2005 y 2007, suponen la mayor filtración bancaria en la historia ya que saca a la luz alrededor de 30.000 cuentas.
El valor total de estas cuentas es de unos 102.000 millones de dólares, cerca de 78.000 millones de euros al cambio de 2007. El Confidencial destaca que, en una extensa carta remitida a los medios que han participado en la investigación, "el HSBC Swiss Private Bank admite que, aunque tener una cuenta en Suiza no sea ilegal, hay casos en los que los clientes se aprovecharon del secreto bancario para ocultar cuentas no declaradas". Hervé Falciani colabora desde 2009 con la justicia de varios países, a las que aporta información, que obtuvo cuando trabajaba en la filial suiza del HSBC, de más de 130.000 supuestos evasores fiscales que podrían tener dinero en bancos suizos.
Los documentos obtenidos en la investigación revelan que "la rama suiza del banco permitió a los clientes retirar dinero en efectivo, en ocasiones en moneda extranjera no usada en el país, creó sistemas para permitir evadir impuestos, conspiró con algunos clientes para esconder cuentas negras no declaradas a las autoridades fiscales nacionales y abrió cuentas a criminales internacionales, empresarios corruptos y otros individuos de riesgo". Desde el HSBC se reconocen "los comportamientos ilegales de su rama suiza", aunque también aseguran que "la misma no fue integrada totalmente tras su compra en 1999, lo que permitió que mantuviera unos estándares significativamente más bajos". La entidad, que es la segunda más importante del mundo, ha admitido que "no tomó medidas contra la rama suiza hasta 2011".
Durante esta etapa, el banco estuvo presidido por Stephen Green, que abandonó el cargo en 2010 para convertirse en ministro de Comercio en el Gobierno de David Cameron. Aunque las autoridades fiscales de todo el mundo han podido acceder a los documentos desde 2010, la naturaleza de la conducta de la rama suiza del HSBC no había salido a la luz hasta ahora. Dichos documentos prueban que "el banco asesoró a familiares de dictadores, a personas implicadas en casos de corrupción en África y a gente involucrada en el comercio de armas y de los conocidos como diamantes de sangre". A raíz de la filtración de esta información, HSBC tendrá que enfrentarse a investigaciones criminales y a cargos en Francia, Bélgica, Estados Unidos y Argentina, aunque, por ahora, no se han abierto acciones legales contra el banco en Reino Unido.