Unión Europea

Cameron amenaza con dejar la UE si no se limita la inmigración

Por David Sánchez Torrico3 min

Internacional28-11-2014

David Cameron, primer ministro británico, ha manifestado este viernes que su plan para moderar la llegada de inmigrantes de la Unión Europea al Reino Unido traería consigo cambios en los tratados de la UE, algo que según sus palabras supone "un requisito imprescindible" en las negociaciones que busca mantener con sus socios europeos, antes de convocar el referéndum sobre Europa en 2017. Cameron se ha mostrado dispuesto a dar a los ciudadanos procedentes de la UE un plazo de seis meses para encontrar trabajo, y limitarles el acceso a beneficios estatales como manera de controlar la inmigración, siempre que se alce con la victoria en los comicios del próximo mes de mayo de 2015 en el Reino Unido.

El primer ministro británico ha amenazado con abandonar la Unión Europea si Bruselas ignora sus demandas. Cameron ha prometido bloquear los beneficios sociales y las exenciones fiscales a los inmigrantes, durante los primeros cuatro años de su llegada a Gran Bretaña. "No hay duda de que el plan general requerirá algunas modificaciones de los tratados, y confío en nuestra capacidad para negociar", ha manifestado ante la prensa en la presentación de sus medidas, en un discurso pronunciado en Straffordshire, en el centro de Inglaterra. Cameron ha mostrado las puntos principales de su plan para reducir el ingreso de comunitarios, que formará parte de sus negociaciones de reforma de la Unión Europea antes del referéndum sobre la permanencia o salida del bloque. David Cameron cuestionó la política de puertas abiertas durante el mandato de Tony Blair, y rememoró cómo Gran Bretaña recibió un flujo de un millón de habitantes de un solo país, Polonia. El primer ministro británico ha querido dejar claro que "no estoy en contra de la inmigración, pero sí a favor de un control sobre el número de extranjeros que entran en el Reino Unido para buscar trabajo", y es que Cameron quiere hacer más complicado que los inmigrantes comunitarios traigan familiares. Además, se impedirá volver a entrar a aquellos ciudadanos que hayan cometido algún tipo de fraude en el Reino Unido. "La gente quiere que el Gobierno controle el número de personas que vienen aquí y las circunstancias en que lo hacen", ha declarado el jefe del Gobierno, que considera las reformas como "radicales, pero razonables y "justas". Las principales medidas tomadas por Cameron fueron ya avanzadas en el pasado, y entre las líneas principales destacan algunas: los inmigrantes de la Unión Europea deberán vivir un plazo mínimo de cuatro años antes de poder beneficiarse de las ayudas estatales, reducir la cantidad de inmigrantes comunitarios que solicitan los subsidios que se conceden por cada hijo, sobre todo cuando los menores ni siquiera residen en este país; plantear la salida de inmigrantes del Reino Unido si no han encontrado trabajo al cabo de seis meses, restringir el número de miembros familiares que los inmigrantes pueden traer cuando se establecen en este país, acelerar el proceso de deportación de personas condenadas por delitos o exigir a los comunitarios que emigren a este país que lo hagan cuando tengan antes una oferta de empleo. Por su parte, el líder de la oposición laborista, Ed Miliband, ha acusado a Cameron de "no tener credibilidad en materia de inmigración, y de haber roto las promesas de recortar el número de extranjeros. Cameron ha realizado esta intervención después de que la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) mostrase este jueves un aumento de la inmigración. El Reino Unido ha recibido a unos 583.000 inmigrantes en el año hasta el pasado mes de junio, frente a los 502.000 registrados en ese mismo periodo del año anterior. Este aumento de la inmigración ha estado propiciado, entre otros factores, por la llegada al Reino Unido de 45.000 personas procedentes de la Unión Europea, según la ONS. La portavoz de la Comisión Europea, Margaritis Schinias, ha señalado que "analizaré con calma y prudencia el plan anunciado este viernes por Cameron. El diálogo comienza hoy para acercar opiniones sin dramatización excesiva". Schinias ha agregado que "la Comisión tiene la intención de ver lo que podemos hacer sin cerrar la puerta. Se trata de las ideas británicas y son parte del debate, deben ser examinadas sin dramas y discutidas con calma y la prudencia".