Religión
El Papa aboga por la dignidad de la persona
Por David Sánchez Torrico3 min
Sociedad25-11-2014
Jorge Bergoglio ha visitado el Parlamento Europeo este martes, donde ha emitido un discurso centrado en el orgullo de la persona y en la unidad de Europa, que "no debe eliminar la riqueza de la diversidad de los pueblos europeos que la integran". El mensaje emitido por el Papa ha estado lleno de esperanza, "basada en la confianza de que las dificultades puedan transformarse en poderosas promotoras de unidad, para vencer todos los miedos que Europa está atravesando", según sus propias palabras.
El Papa Francisco ha mostrado su temor ante las consecuencias de la crisis y la desconfianza de los ciudadanos en las instituciones. En su discurso, Jorge Bergoglio ha alertado de que no puede admitirse que "el Mediterráneo se convierta en un gran cementerio". Con su mensaje en la Unión Europea, el Pontífice ha querido mostrarse como un punto de conexión entre los ciudadanos y las instituciones, en una época en la que las políticas tienden a primar más las necesidades del sistema que las de los ciudadanos. "¿Qué dignidad podrá encontrar quien no tiene qué comer o el mínimo necesario para vivir del trabajo, que le otorga esa dignidad?", se ha cuestionado el Papa, al mismo tiempo que ha querido mandar un "mensaje de esperanza y de aliento a todos los ciudadanos europeos" . Y es que ha defendido que "el proyecto político europeo debe poner de nuevo en el centro al hombre, que está dotado de dignidad y trascendencia". Jorge Bergoglio ha querido recordar que "en el fundamento del proyecto europeo aparece la confianza en el hombre, entendido no tanto como ciudadano, ni como sujeto económico, sino el hombre como persona dotada de una dignidad". Según su punto de vista, "frente a una Europa más amplia que la original, más influyente, parece codearse la imagen de una Europa un poco envejecida y comprimida, que tiende a sentirse menos protagonista en un contexto que observa con frecuencia con distanciamiento, desconfianza y tal vez con sospecha". El Papa, en su conferencia a los más de 500 eurodiputados, ha querido centrarse en la necesidad de devolver la dignidad a las personas, ya que "de otro modo Europa corre el riesgo de perder lentamente la propia alma y también aquel espíritu humanístico que dice amar y defender". El Papa Francisco ha puesto énfasis en que "persisten demasiadas situaciones en las que los seres humanos son tratados como objetos, de los que se puede programar la concepción, la configuración y la utilidad y que después pueden ser tirados cuando ya no sirven porque se han vuelto débiles, enfermos o viejos". Según Bergoglio, "vivimos en una opulencia insostenible que ha condenado la prevalencia de las cuestiones económicas y la absolutización de la técnica y la cultura de las sobras". Además, el Papa no ha reivindicado la identidad cristiana de Europa o de sus orígenes, al afirmar que "la Iglesia católica no pone en peligro la laicidad de los Estados, sino que ofrece solo un diálogo abierto y transparente con la Unión Europea". Pablo Iglesias, líder de Podemos, transmitió a través de Twitter su fascinación ante la comparecencia del Papa Francisco en el Parlamento Europeo. “Interviene el Papa en la Eurocámara. Defiende los derechos humanos y sociales como base de dignidad. Bravo”, fueron sus palabras. Por su parte, los seis eurodiputados de la Izquierda Plural (IU, Alternativa Galega de Esquerda e ICV), abandonaron el lugar cuando el Papa tomó la palabra para protestar por la invitación que le han concedido. "Nos hemos salido porque entendemos que esto es una institución pública y aquí no caben sermones religiosos", afirmó la portavoz del grupo, Marina Albiol. "Entendemos que debe haber una separación entre las creencias religiosas y las instituciones públicas", manifestó Marina Albiol, al tiempo que consideró "muy llamativo que otros eurodiputados de grupos con vocación laica no se hayan sumado a la protesta".