NUEVO MINISTRO

Zaplana llega a Trabajo asegurando que habrá diálogo social con los sindicatos

Por Raquel González2 min

Economía14-07-2002

Aunque el ministro sea distinto al del 20-J, el plan de desempleo seguirá siendo el mismo. No hay planes de retirada del decretazo, que es lo que siguen reclamando los sindicatos. Para ellos, el nombre y la cara del ministro cambian, pero no la política que el nuevo ministro de Trabajo llevará a cabo.

Eduardo Zaplana deja la presidencia de la Generalitat Valenciana con una intención muy clara, la de promocionar el diálogo social y, sobre éste, seguir haciendo los cambios y reformas que los nuevos tiempos y problemas dispongan. El estrenado ministro de Trabajo no podía llegar de otro modo a Madrid, más que anunciando a los cuatro vientos su disponibilidad al consenso con los sindicatos. Actualmente, el Ministerio de Trabajo es una patata caliente, ya que el 20-J pesa aún demasiado. Eso a pesar de que el mismo Zaplana, desde su puesto de presidente, dijese que la huelga no había tenido acogida –versión que han mantenido todas las cabezas visibles del Gobierno-. Pero los sindicatos no se lo acaban de creer, y eso a pesar de que de las primeras llamadas oficiales que Zaplana hizo como ministro de Trabajo, fueron destinadas a ellos, a los líderes sindicales. “Con un café o un zumo no se solucionan las cosas”, ha manifestado José María Fidalgo, secretario general de CC.OO. Tanto Comisiones como UGT han asegurado que mientras el decretazo siga en su sitio tienen muchas dudas de que el diálogo social se vaya a restablecer. Pero Zaplana no ha dicho nada de retirar el plan de desempleo que tantas enemistades ha creado. “En estos momentos se debate en el Parlamento, hay iniciativas de los grupos políticos y tiene que seguir su tramitación”. Esas palabras son las referidas por Zaplana en torno al decretazo. Eduardo Zaplana ha dejado la Comunidad Valenciana como una de las comunidades de España donde más ha bajado el nivel de parados. En 1995, cuando llegó a la Presidencia, el nivel de desempleo era del 22 por ciento; actualmente la cifra de parados se sitúa en el 9,60 por ciento, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).