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ORIENTE PRÓXIMO

Escalada de tensión entre Israel y Hamás

Por Sergio CastillaTiempo de lectura3 min
Internacional07-07-2014

Una vez más, la situación en Oriente Próximo está al borde del conflicto. A raíz del secuestro y muerte de tres jóvenes judíos en Cisjordania y el posterior asesinato de un adolescente palestino como respuesta, la tensión en la franja de Gaza ha ido en incremento. Más de 150 proyectiles han sido lanzados en las últimas tres semanas, unas agresiones que fueron respondidas por varios ataques aéreos israelíes. Entre tanto, continúan aumentando las presiones sobre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, para que actúe con mayor contundencia contra Hamás, aunque éste sigue descartando una confrontación abierta.

Nueve militantes palestinos han muerto durante este lunes en los ataques de la aviación israelí sobre la franja de Gaza, en una jornada más de enfrentamientos que eleva la tensión entre israelíes y palestinos. Otras seis personas han resultado heridas de diversa gravedad. Los cuerpos de seis de las víctimas, pertenecientes al ala militar de Hamás, han sido recuperados de un túnel que fue alcanzado el domingo por los bombardeos en la localidad de Rafah, fronteriza con Egipto. Hamás utiliza los túneles para introducir víveres y armas en la franja. Otro miliciano del movimiento islamista ha muerto en circunstancias aún poco claras, a lo que se suma la muerte de dos miembros del grupo radical palestino Yihad Islámica tras un ataque israelí sobre el campo de refugiados de Al Bureij, en el centro de Gaza. Se trata de la jornada con más bajas para Hamás desde la guerra fronteriza de 2012. El lanzamiento de proyectiles de mortero y cohetes Qassam desde Gaza contra el sur de Israel se ha intensificado la mañana de este lunes, dejando el balance de un herido. Según el Ejército israelí, los últimos ataques se han producido como respuesta al lanzamiento desde la franja de más de 25 cohetes que alcanzaron territorio israelí este domingo. En total, más de 150 proyectiles han sido lanzados en las últimas tres semanas, unas agresiones que han sido respondidas con varios ataques aéreos israelíes. También en la mañana del lunes, una unidad del Ejército israelí que patrullaba la frontera ha sido atacada con lanzagranadas, sin que se hayan producido víctimas. A pesar de la creciente tensión, Netanyahu sigue apostando por la contención ante Hamás y descarta una confrontación abierta. El primer ministro israelí es consciente de que, si tomara tal decisión, rescataría a Hamás de su crítica situación económica y política y provocaría la caída de misiles palestinos en ciudades como Tel Aviv o Jerusalén, tal y como advierten desde el brazo armado del grupo islámico. La decisión de Netanyahu es contraria a las presiones que han tratado ejercer algunos de los miembros de extrema derecha de su gabinete como, por ejemplo, el ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman, quien ha roto su alianza política con el Likud (el partido gobernante en Israel) aunque no abandonará el Gobierno. Por otra parte, la destrucción de los túneles de contrabando por parte del Ejército egipcio ha agravado la ya de por si dura situación económica de Gaza (alrededor del 45 por ciento de desempleo) y de Hamás (se queda sin los impuestos por los túneles). El grupo islámico vive un momento crítico tras el enorme distanciamiento con Egipto y los graves problemas en el proceso de reconciliación con Al Fatah que lidera el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Abu Mazen, a quien Hamás exige que pague el sueldo de los 40.000 funcionarios del poder islamista en Gaza. La gota que colmó el vaso en estas relaciones fue el secuestro y asesinato de los tres estudiantes judíos en Cisjordania. La tensión entre palestinos e israelíes ha ido en aumento precisamente a raíz de estos hechos. Como respuesta, seis extremistas judíos acabaron con la vida del adolescente palestino Mohamed Abú Judeir, de 16 años. Un día antes, los sospechosos intentaron raptar a un niño palestino de 9 años. Los detenidos están bajo custodia del Shin Bet, los servicios secretos israelíes para el interior de Israel y los territorios palestinos ocupados.