CASO NÓOS
La Infanta Cristina, una pieza más del caso Nóos
Por Selene Pisabarro2 min
España09-02-2014
El juez Castro ha conseguido interrogar a la Infanta Cristina en condición de imputada tras dos intentos. La hija del Rey es uno de los engranajes del caso Nóos, en el que se acusa a su marido, Iñaki Urdangarín, de incurrir en varios delitos como la malversación de fondos públicos. La trama comenzó hace diez años aunque hasta hace tres no se ha destapado.
El juez Castro imputó a la Infanta Cristina el pasado 3 de enero por su presunta implicación en el Caso Nóos. Se trata de la segunda imputación en menos de un año, pero la primera no fructificó debido a que la Fiscalía Anticorrupción la recurrió ante la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca. Desde entonces, ha supuesto un rifirrafe continuo entre Castro y el Fiscal, Pedro Horrach, que a pesar de que ambos buscan destapar la trama del marido de la Infanta, Iñaki Urdangarín, no coinciden en el camino que debe continuar cada uno respecto a la figura de Doña Cristina. Horrach emitió el 17 de diciembre un escrito en el que recriminaba a Castro que no estaba siguiendo un procedimiento adecuado para demostrar que la justicia es igual para todos, sino que entraba en valoraciones con la Infanta por ser quien era. En el auto en el que imputó a Doña Cristina, Castro aprovechó para responder al Fiscal que su labor es la de tratar de esclarecer los hechos que rodean al Caso Nóos y que la citación no supone otra cosa que asegurar que se va a llegar hasta el final. Además, le contestó que, como juez, tiene la tarea de juzgar si una persona ha cometido un delito o no independientemente de quién sea. El magistrado del juzgado de instrucción número 3 de Palma lleva tres años investigando la actividad del Instituto Nóos y la sociedad mercantil Aizoon S.L., de las que Iñaki Urdangarín y su ex socio, Diego Torres, formaban parte de la Junta Directiva. El delito principal del que se les acusa es la malversación de fondos públicos aunque también se les implica en tráfico de influencias, cohecho y falsedad documental. La trama se remonta al año 2004, cuando el yerno del Rey comenzó a presidir el Instituto y en 2006 cuando su ex socio le relevó. El 23 de febrero de 2013, Urdangarín declaró ante Castro en calidad de imputado. Torres lo hizo una semana antes, aprovechando la ocasión para inculpar a la Infanta Cristina –que posee el 50 por ciento de Aizoon y tenía capacidad participativa en Nóos- y a la Casa Real que, según él, estaba al tanto de su actividad. El caso Nóos también está ligado al Palma Arena, en el que está implicado el ex presidente balear Jaume Matas, además de cargos ejecutivos y políticos, por malversación de fondos y blanqueo de dinero, entre otros. Castro avistó la relación entre ambos cuando el 22 de julio de 2011 abrió la Operación Babel –la actual trama de Urdangarín- y descubrió que muchos de los convenios suscritos entre los gobiernos de las Islas Baleares y de la Comunidad Valenciana y el Instituto Nóos eran irregulares ya que simulaban la contratación de servicios que no se llegaban a realizar. La Casa Real ha adoptado una postura acorde a la línea del proceso: si en un primer momento mostraba su sorpresa con la postura del juez, ahora ha admitido su decisión y está conforme con que la justicia sea igual para todos.