Banca

La banca tiene que ser rentable y no solo sólida

Por Carlos Martínez de Leyva3 min

Economía06-11-2013

Emilio Botín el martes inauguró la VI Conferencia Bancaria Internacional, organizada por el Santander en su sede madrileña de Boadilla del Monte. Participan el ministro de Economía, Luis de Guindos, Luis María Linde, gobernador del Banco de España, Emilio Botín, presidente del Santander, Joaquín Almunia, Comisionado para la Competencia de la Comisión Europea, Felipe Larraín, Ministro de Hacienda chileno, Víctor Constancio, vicepresidente del BCE, y el ministro polaco, Leszek Balcerowicz, entre otros. En la apertura, Juan Manuel Cendoya, directivo del Santander, ha elogiado a Luis de Guindos.

El presidente del Banco Santander. Emilio Botín, durante su intervención ante mil ejecutivos financieros y autoridades bancarias internacionales, recordó a los reguladores que la banca tiene que ser rentable y no solo sólida "si quiere atraer a los clientes e inversores". También pidió "una época de estabilidad regulatoria" tras los continuos cambios de normas que ha vivido el sector. Botín abogó por avanzar hacia la unión bancaria, que servirá para recuperar la confianza y permitirá realmente que fluya el crédito y se dé un mayor crecimiento económico. Una Europa “más integrada y sólida” ayudará a recuperar la confianza en el euro y en la banca europea, y servirá para romper definitivamente el círculo vicioso entre la deuda soberana y la bancaria, lo que espera que se produzca en 2014. Se mostró dolido porque la calificación del Santander baja varios peldaños por ser un banco español, mientras que la de otros competidores sube porque sus países son más solventes que España. El banquero defendió también la implantación de un supervisor único en el Viejo Continente, "un paso decisivo e irreversible" en el proceso de integración financiera que, a su juicio, debe ir acompañado de un mecanismo único de resolución. "Es necesario contar con una única autoridad con poderes bien definidos y con acceso a un fondo único de resolución que sea el recurso de última instancia en caso de crisis de cualquier entidad", resumió. Defendió el modelo de banca comercial y elogió la reforma financiera llevada a cabo en España porque ha permitido distinguir las entidades sanas de aquellas cuya solvencia y viabilidad estaba muy dañada. Y por eso, Botín ha considerado que "hoy podemos afirmar que el sector bancario español es uno de los más sólidos de Europa". Con bancos sólidos y centrados en su negocio, e instituciones fuertes y capaces de desarrollar políticas responsables se logrará "consolidar la recuperación económica, y podremos mirar hacia delante". En su opinión, se podrá decir que la crisis ha terminado "cuando se hable menos de los bancos y más de las empresas". El ministro de Economía, Luis de Guindos, declaró que la última Encuesta de Población Activa (EPA) muestra un aumento de la ocupación en el sector privado por dos trimestres consecutivos, y apuntan "a una estabilización del empleo". En otro orden de cosas, Luis de Guindos, dijo que el Gobierno ahorrará este año al menos 8.000 millones de euros en el pago de intereses de la deuda pública, lo que facilitará el cumplimiento del objetivo de déficit comprometido en el 6,5 % del PIB. Anunció que el Gobierno aprobará en los próximos días un Real Decreto Ley para transponer la directiva europea que permite adaptar al ordenamiento español las normas de Basilea III, lo que permitirá tener en cuenta los activos fiscales diferidos (DTA) -ahorros fiscales futuros-. El Gobierno ha visto mal la elección de José María Roldán para presidir la Asociación Española de Banca (AEB) durante los próximos cuatro años que fue director general de Regulación del Banco de España. Por ello, se entiende que fue corresponsable de la crisis del sector financiero que, provocó que España pidiera 40.000 millones a Europa, aunque las ayudas públicas totales recibidas por el sector ascienden a 61.000 millones. La intención del Ejecutivo es que ningún responsable que haya participado en la crisis siguiera con cargos de responsabilidad. Por eso, fuentes del Gobierno manifestaron su "profundo malestar" por el nombramiento que consideran poco "ético" ante la sociedad.